Amenazó con tirarse al vacío desde la azotea del edificio en contrucción en el que ha trabajado durante los últimos meses si no le pagaban todos las nóminas atrasadas. El hombre, de 42 años y origen camerunés, aseguró que saltaría desde una altura aproximada de nueve pisos si la empresa, que al parecer se encuentra en suspensión de pagos, no le abonaba los cerca de 60.000 euros que le debía. La noticia saltó sobre las 9.45 de la mañana de este lunes, cuando el sistema de Emergencias 112 recibió una llamada que informaba sobre la presencia de un hombre en la planta más alta de un edificio en obras localizado en la avenida Ingeniero José María Garnica, a la espalda de la Gerencia de Urbanismo, que amenazaba con arrojarse al vacío. Con esta información, el centro coordinador movilizó a efectivos de la Policía Nacional, Policía Local, Bomberos y sanitarios.

Fue el primer cuerpo policial el que se hizo cargo del caso. Activado el protocolo para este tipo de incidentes, un negociador de la Policía Nacional se trasladó hasta la azotea y cogió el testigo de sus compañeros del radiopatrulla, que fueron los primeros en calmar los ánimos del trabajador. Durante las dos horas y media que duró la intervención, escucharon las reclamaciones del hombre y se pusieron en contacto con un representante de la empresa deudora, que incluso se trasladó hasta el lugar para colaborar en el operativo. De hecho, la actitud de los responsables de la empresa, que estuvieron en todo momento informados por su representante, facilitó que el final fuera feliz, ya que sólo el compromiso de estos por abonarle la cantidad que reclamaba el trabajador hizo que este abandonara la idea de arrojarse al vacío.

Otras fuentes aseguraron que la constructora ha presentado recientemente un concurso de acreedores que ha paralizado cerca de 1.500 viviendas que tenía en marcha, algunas de ellas para promotoras de alto nivel. Uno de los edificios afectados por los impagos es en el que se subió el hombre y donde había estado trabajando en tareas de seguridad y mantenimiento. Junto con el concurso de acreedores, Byco espera presentar «a corto plazo» una propuesta de convenio anticipado de pago de su deuda junto a un plan de viabilidad para la empresa que pasaría por reestructurarla para reorientar su negocio a obras no residenciales.