Las obras de rehabilitación del histórico mercado municipal de Salamanca, en el corazón del barrio del Molinillo, se retomaron el pasado mes de enero y ahora la fase constructiva llega a su parte más compleja, según explicó a este periódico la edil de Comercio y Vía Pública y portavoz del PP, Elisa Pérez de Siles, con el desmontaje de la mitad de la cubierta de fibrocemento. Esto se producirá entre los días 23 (domingo) de febrero y el miércoles 26, ambos incluidos, lo que obligará a clausurar en ese intervalo temporal el inmueble por seguridad de los usuarios y los operarios.

Los trabajos de desmontaje de la cubierta iban a realizarse ya, pero se han retrasado para disponer el andamiaje de trabajo. Sin embargo, los usuarios podrán seguir abasteciéndose de todos los productos que necesiten en el mercado provisional que se levantó junto al antiguo para que continuase la actividad comercial, ya que al ser un edificio independiente no se verá alterado en su discurrir cotidiano.

«Actualmente, desde el reinicio de las obras de enero se ha terminado el refuerzo de la cimentación (micropilotaje); se ha efectuado también parte de la reforma de la red de saneamiento exterior y, por último, el montaje de las cimbras de soporte de la nueva estructura de cubierta, incorporando una plataforma que será desde la que se acometerá el levantado de la cubierta de la primera fase de las obras», explicó Elisa Pérez de Siles a este periódico.

Los trabajos de reforma se paralizaron en mayo de 2019 después de que los técnicos de Urbanismo detectasen varios problemas sobrevenidos. Ello requirió que se redactase un proyecto técnico que la Junta autorizó en septiembre de 2019, un sí que era preceptivo al tratarse de un Bien de Interés Cultural (BIC). El mercado es una joya de estilo neomudéjar obra del arquitecto Daniel Rubio (1923-1925).

Por otro lado, La Junta de Gobierno Local aprobó ayer la modificación de la Ordenanza Reguladora de los Mercados Minoristas con el fin de adaptar el servicio que prestan estas infraestructuras municipales a las nuevas necesidades de los consumidores y revitalizar la actividad. Así, se establece ahora que un mínimo del 50% de los puestos de cada mercado debe dedicarse a carnicería, pescadería y frutería. El resto de porcentajes son los siguientes: congelados, un 30%; panaderías, un 30%; comestibles, un 30%; comidas preparadas, un 30%; varios, un 10% y hostelería, idéntico porcentaje. En este último caso quedan exceptuados los mercados de Bailén, Carranque, El Carmen, El Palo y La Merced, donde las actividades hosteleras se incrementan hasta el 20%.

Horarios comerciales

El horario de apertura se mantiene de 08.30 a 14.30 horas, si bien se flexibilizan los requisitos para autorizar la apertura por las tardes y los domingos siempre que sea solicitado por los titulares de los puestos. Hasta ahora, debían suscribir esa petición el 75% de estos, mientras que con la modificación la petición debe ser realizada por un 50% de los titulares o por acuerdo de la Asociación de Comerciantes, si la hubiese.

Además, los concesionarios podrán ser titulares en un mismo mercado de un máximo del 10% del total de los puestos, frente al 4% actual. En aquellos mercados que tengan menos de 30 puestos se permitirá la titularidad de hasta tres. Incluso, se reduce de dos a seis años el periodo mínimo en el que se permite realizar transmisiones y el Ayuntamiento se compromete al fomento del asociacionismo y a que los comerciantes participen en el funcionamiento de los inmuebles comerciales a través de las entidades asociativas.

Por último, los titulares de los puestos dispondrán de un año desde la entrada en vigor de la modificación de la ordenanza para eliminar el uso de bolsas de plástico no biodegradables.