José Ramón Moreno García y Jesús Bermúdez Zurita, se conocieron cuando eran pequeños: "Siempre ha habido mucha compenetración entre los dos y, con ello confianza", explicaron. Fue su pasión por la moda y los animales, "sentirnos atraídos por la moda, conectar con los animales, y a veces, incluso sentir su dolor", la que les llevó a pensar que su proyecto "no podía quedarse vacío de todo eso". Así, y con el fin de poder contribuir con diferentes asociaciones de animales de todo el mundo y destinar una parte de los ingresos a ellas, nace Elphan y sus camisetas, una marca que apuesta por combatir la caza furtiva de animales y la explotación.

Tras años de trabajo y esfuerzo, ambos decidieron emprenderse en un viaje emocional y de conciencia que para ellos "era una necesidad para la sociedad". Fue entonces, a raíz de una frase que dijo Frank Cuesta en su programa 'Frank de la Jungla', cuando ambos entendieron que "no era tan desorbitada la idea de vincular la marca con la reivindicación de los derechos de los animales". Además, José añadió: "Honrar a los animales vía nuestra marca, crear una identidad de la cual transmite que la ropa no se hace con ellos sino para ellos, es magnífico".

Por otro lado, José resaltó una frase del mítico Frank Cuesta que le dejó marcado: "La única manera de que podamos subirnos a un elefante es rompiéndole el alma y el espíritu, y para ello, se le pega, se le castiga y se le daña". Una frase, según ambos, "tan real como dura" que les topó con una dosis de realidad.

A raíz de ahí, empezaron a investigar acerca de los elefantes, tomando en base "como un animal puede ser tan grande y tan tierno al mismo tiempo". Un animal, que para ellos, desprende los tres valores que sienten imprescindibles para su marca solidaria "lealtad, fuerza y longevidad".

Así, Jesús explicó que el elefante ha creado la marca Elphan porque "igual que los elefantes rejuvenecen los hábitats transportando especies de diferentes semillas, nosotros lo asimilamos con qué Elphan trata de rejuvenecer la conciencia de aquellos que participan en la tortura del turismo de los elefantes en Tailandia, y la caza furtiva de los elefantes africanos". Asimismo, ambos explican que para ir en sintonía con los valores han cuidado a la perfección los detalles: "El material de las prendas es 100% ecológico".

Por otro lado, explicaron que en su proyecto, no solo se tienen en cuenta a los animales, sino que también las condiciones precarias que sufren los trabajadores de la industria textil "por eso trabajamos con Fairtrade para garantizar que las prendas han sido creadas en un ambiente digno".

Finalmente, afirmaron que el proyecto es una iniciativa cargada de ilusión y esfuerzo, la cual requiere mucho tiempo. Además, reclaman la falta de conciencia por parte de la sociedad frente a estos temas y se hacen partícipes de una iniciativa que para ellos "es un granito de arena en una lucha que parece no tener fin"