La Mesa del Senado ha dicho que es «irrevocable» la renuncia al escaño presentada por el senador de Vox Juan Ros al estar investigado por presunta violencia de género contra su mujer, a pesar de que haya enviado a la presidencia de la Cámara dos escritos posteriores arrepintiéndose de haber dejado el cargo y tratando de recuperarlo.

Así lo comunicó en una rueda de prensa la vicepresidenta primera del Senado, Cristina Narbona, que explicó que la Mesa ha estudiado dos escritos remitidos por Ros para recuperar su acta de senador. Narbona recordó que, de acuerdo con el marco legislativo, esta renuncia tiene efectos «inmediatos e irrevocables» desde el momento en el que Ros se dirigió a la Mesa el 20 de febrero para comunicar que renunciaba a su condición de senador.

«La Mesa ha considerado que no había lugar a tener en cuenta los escritos que ha remitido con posterioridad. Además, se ha visto cuestionado por su propio grupo por un comportamiento inadecuado que no debe ser tolerado», subrayó Narbona, en referencia a las declaraciones del portavoz de Vox en el Senado, Jacobo González-Robatto, dando por definitiva la salida del senador.

Los hechos denunciados ocurrieron en Alhaurín de la Torre. Agentes de la Guardia Civil acudieron a una vivienda tras un aviso y se encontraron a la mujer de Ros con signos de violencia y restos de sangre.

La mujer fue trasladada al Hospital Clínico con politraumatismos en varias partes del cuerpo y ante las sospechas, se puso en marcha el protocolo de violencia de género. El caso llegó al Juzgado de Violencia contra la Mujer número 1 de Málaga, que el pasado viernes acordó una orden de alejamiento para el exsenador.