La alarma creada en el ámbito empresarial en plena crisis del coronavirus llevó ayer a la Junta de Andalucía a pedir calma, para atenuar la incertidumbre que planea en mentideros laborales que sitúan los despidos masivos o los cierres en el horizonte más extremo. El consejero andaluz de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Rogelio Velasco, reclamó «paciencia» a las empresas y los sindicatos e insistió en la necesidad de solventar los actuales obstáculos «con la cabeza fría».

«No se deben adoptar decisiones precipitadas porque es una crisis transitoria, más pronto que tarde va a desaparecer y la actividad económica volverá a la normalidad», solicitó Velasco en la presentación de la programación de nuevas ayudas de la agencia IDEA celebrada en el Rectorado de la Universidad de Málaga. En esta línea, llegó a pedirle a las compañías que «flexibilicen sus sistemas de cobros y pagos, y no insten al concurso de acreedores de un cliente que no les pagó a 29 de febrero».

«Esta es una crisis transitoria y dos semanas o un mes más tarde ese cliente va a estar en condiciones de realizar su pago, manteniendo la cabeza fría se puede solventar esta situación», incidió el consejero.

Ahora bien, el titular andaluz de Economía subrayó que el Gobierno regional está totalmente preparado «para implementar en última instancia medidas más potentes relativas a pagos y cobros».

Tranquilidad en la patronal

Por su parte, durante su participación en la actividad que le llevó ayer a compartir tarima en la UMA con el consejero Rogelio Velasco, el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, lanzó un mensaje de calma al aseverar que «no hay el menor atisbo ni el ánimo empresarial de despedir a nadie».

«Hay que tener tranquilidad, capacidad de acción, tomar medidas precautorias», abogó en declaraciones recogidas por Efe el responsable de la patronal andaluza y de la malagueña.

A su juicio, un ejemplo de que hay que mantenerse serenos es que «algunas empresas que habían tomado decisiones prudentes» en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), con sede en Málaga, y otros centros de trabajo, «han vuelto a la normalidad».

«Todos los ciudadanos están ya muy concienciados de lo que hay que hacer y las empresas las primeras porque, normalmente, se suelen adelantar por una cuestión lógica de sentido común, ya que les afecta a su plan de negocios y sus resultados», recalcó para reforzar sus argumentos Javier González de Lara.