La velocidad con la que el coronavirus se contagia ha obligado a reforzar las medidas de prevención para limitar su extensión. La diócesis de Málaga ha ampliado y reforzado las medidas adoptadas a principios de marzo con idea de limitar el riesgo de contagio en las celebraciones religiosas o la actividad diocesana, suspendiendo las catequesis y recomendado no celebrar actos de piedad de gran afluencia, como viacrucis, retiros o conferencias de Cuaresma.

En el nuevo listado de recomendaciones del Obispado de Málaga se insiste en especial en pedir a los católicos que asuman las medidas necesarias para proteger a los más vulnerables, como las personas mayores, a las que se les recomienda no ir a misa a las iglesias y que sigan la Eucaristía que se retransmite por televisión.

En los actos de piedad como los besamanos o besapiés a las imágenes de Jesús y la Virgen, se insiste en que no se besen físicamente las imágenes, por ser causa de contagio con el coronavirus, por lo que aconsejan hacer una inclinación ante la imagen o lanzarle un "beso al aire".

También se propone evitar los encuentros y actividades de muchas personas en las dependencias parroquiales, por lo que se pide que no se ocupe el aforo por encima del tercio de su capacidad real, para que se respete la distancia entre las personas y no hay contacto físico, tal y como piden las autoridades sanitarias y gubernamentales. Además se han suspendido las catequesis hasta después de la Semana Santa, así como la formación en los centros teológicos, en la línea de la suspensión de las clases en colegios, institutos y universidades. En el caso de los funerales se recomienda solo la presencia de los familiares y allegados.

Por su parte, el obispo de Málaga, Jesús Catalá, ha suspendido toda asu actividad de visita pastoral y se insiste en que los templos sólo abran algunas horas al día.

Eucaristía

La celebración de la misa es uno de los momentos de encuentro de los católicos y donde se insiste en las medidas de prevención de contagios. Así, se recuerda que ya se pidió la retirada del agua bendita de las pilas de los templos y que la comunión se reciba en la mano. Ante la eventualidad de que alguien pida comulgar directamente en la boca, el Obispado de Málaga recomienda que lo haga cuando todos hayan terminado. Además, se pide a los sacerdotes que se desinfecten las manos antes y después de dar la comunión y, en todo caso, que no se dé la comunión bajo las dos especies.

La diócesis apunta que el "Rito de la paz" en la Misa es litúrgicamente opcional, por lo que se puede suprimir sin problema, pero que en el caso de hacerlo se debe limitar a un gesto de inclinación de cabeza junto a las palabras "la paz sin entrar en contacto entre personas.

La Diócesis de Málaga invita a todos los católicos malagueños a rezar individual o comunitariamente, mediante el rezo del Santo Rosario y la Liturgia de las Horas, por aquellos que, en todo el mundo, sufren las consecuencias del virus COVID-19, así como por el personal sanitario encargado de atender a los afectados y por los científicos que investigan para encontrar un remedio.