El impacto de la crisis del Covid-19 afecta ya "de manera drástica" al sector inmobiliario residencial, según ha explicado este martes la consultora Tinsa, que apunta que la "caída extrema" de las cifras de demanda y la "paralización reciente de la actividad promotora" conllevará "más que probables ajustes en los precios medios de la vivienda, que comenzarán a reflejarse en las estadísticas de los próximos meses". De momento, las estadísticas no reflejan aún la incidencia de la crisis, pero sí revelan el escenario inmobiliario justamente previo al del estallido de la pandemia, que también va a condicionar la evolución de la economía.

Así, según el estudio IMIE Mercados Locales publicado este martes por la consultora Tinsa, el esfuerzo financiero necesario para la compra de una vivienda hasta la fecha sitúa a Málaga, en el primer trimestre de 2020, como una de las provincias del país donde se exige al comprador destinar un porcentaje mayor de sus ingresos en el primer año de hipoteca, en concreto un 27,1% (igual que en el trimestre anterior). Por delante de Málaga sólo se sitúa Baleares, con un 30,8% de esfuerzo financiero. La media española es del 20,7%.

Tinsa ya ha explicado en alguna ocasión que el alto porcentaje que presenta Málaga está en parte influenciado (como también ocurre en Baleares) por la Costa del sol, un mercado muy enfocado a una vivienda de corte turístico y de alto standing donde las compras por parte de extranjeros son muy frecuentes.

El estudio refleja que la hipoteca media concedida en Málaga estos últimos meses se sitúa en 147.228 euros, frente a los 126.974 de media nacional. La cuota hipotecaria de los malagueños, de acuerdo al coste financiero medio vigente, es de 661 euros al mes (en España la media es de 585 euros). A nivel provincial, la cuota hipotecaria media alcanza 816 euros al mes en Baleares, 747 euros en Barcelona, 778 en Madrid y 665 en Guipúzcoa. Las provincias con menor pago mensual de hipoteca son Badajoz y Jaén, que se mueven en 359 euros.

Tinsa insiste en que los datos, correspondiente al mes de marzo, no recogen todavía variaciones de precio causadas por la actual crisis, enmarcándose en la coyuntura observada durante los últimos meses y reflejando la situación del mercado residencial inmediatamente previa al impacto de la emergencia sanitaria en España.

"La perspectiva actual es que la crisis sanitaria afecta ya de manera drástica al sector inmobiliario residencial. Aún a falta de datos actualizados, asumimos una caída extrema a corto plazo de las cifras de demanda", reconoce la firma de tasación.

"Esta situación y la paralización reciente de la actividad promotora conllevará más que probables ajustes en los precios medios de la vivienda, que comenzarán a reflejarse en las estadísticas de los próximos meses. La duración y, por tanto, la intensidad de esta situación de excepción marcará la evolución futura del mercado. Los efectos sobre oferta, demanda y precios serán no obstante lo suficientemente significativos para determinar nuevos paradigmas de un sector que, a buen seguro, será distinto", ha añadido Rafael Gil, director del Servicio de Estudios de Tinsa.

Respecto a los precios conocidos antes de que estallara la crisis del Covid, Málaga presenta una subida interanual del 3%, y un valor medio de 1.684 euros el metro cuadrado. Los valores han subido un 32% desde los mínimos que se alcanzaron en los momentos más duros de la crisis económica, aunque están un 33% por debajo de la época del boom inmobiliaro que duró hasta 2007. Está por ver cómo evoluciotnarán a partir de ahora, con la pandemia.

En el caso de Málaga capital, los precios han aumentado un 4,8% en los últimos doce meses y se sitúa en 1.738 euros el metro. El incremento sobre los valores mínimos de los años de crisis ha sido hasta ahora de un 44%, pero todavía se está un 28% por debajo del boom inmobiliario.

El precio medio en España se incrementó un 2,5% interanual en el primer trimestre del año, hasta 1.383 euros el metro, cifra que representa un aumento del 0,7% respecto al trimestre anterior.