La Asociación Provincial de Constructores y Promotores de Málaga (ACP) ha celebrado este miércoles una reunión telemática con representantes de más de 37 empresas promotoras para poner en común la situación y medidas que necesita el sector que, según el colectivo, se enfrenta ya a tres dificultades simultáneas: la crisis sanitaria, la económica y la de confianza. La reunión ha contado con una intervención del concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga, Raúl López.
La ACP ya adelantó la pasada semana los objetivos imprescindibles en los que actuar para que la economía malagueña no se resintiera de la ralentización de la actividad, destacando como líneas estratégicas el facilitar la liquidez de las empresas, fomentar la inversión, y dar confianza a las familias.
La asociación proponía medidas como ampliar los tres meses de moratoria en el pago de impuestos, prorratear el pago del ICIO a lo largo de la duración de la obra, o ayudar a la compra de la vivienda habitual mediante incentivos fiscales. Además, ponen de relieve que, debido al enorme impacto en las compras de viviendas en Málaga de los cliente extranjeros y no residentes (superior al 30% del total), "cobra mucha importancia responder con estímulos fiscales, incluso transitorios, que atraigan a éstos no residentes a cambiar su vivienda habitual a Andalucía", por lo que se propone la revisión del Impuesto de Patrimonio y de Sucesiones.
Los promotores entienden que, de manera urgente, hay medidas que "ya deberían estar en marcha" como un refuerzo necesario en los ayuntamientos que permita un mayor ritmo de evacuación de expedientes administrativos para la expedición de nuevas licencias de obras, así como la agilización de las Licencias de Primera Ocupación.
"Este último trámite, que ya se puede realizar con la firma de una declaración responsable presentada por el promotor, como largamente venía reclamado la ACP, es una realidad desde la entrada en vigor el pasado 13 de marzo, del Decreto-Ley 2/2020, de mejora y simplificación de la regulación para el fomento de la actividad productiva de Andalucía, pero que sin embargo algunos municipios aún no reconocen", ha afirmado el colectivo empresarial presidido por Juan Manuel Rosillo.
Los promotores esperan que esta agilidad pueda cubrir, en parte, la caída de la actividad en muchos proyectos y sirva preparar el camino para la pronta reactivación, una vez pasado el estado de alarma. "Además, conseguirá dotar de liquidez al sistema con la entrega de viviendas, y proteger a los consumidores de los impactos negativos de retrasos en las fechas esperadas de escrituras", han detallado. La ACP está manteniendo reuniones con los responsables de los distintos ayuntamientos de la provincia, pero también con otros agentes implicados, como pueden ser notarios, registradores o compañías de suministros.
El concejal de Urbanismo de Málaga, Raúl López, ha recordado durante su intervención en el encuentro las medidas adoptadas por el Ayuntamiento en aras de esta agilización y ha puesto en valor el decreto aprobado para este fin.
Representantes de las compañías Endesa e Hidralia, a través de sus máximos responsables en la región, también se han sumado a este compromiso, confirmando que trabajan con protocolos internos, para agilizar sus expedientes.
En concreto, Fulgencio Díaz, gerente territorial de la Costa del Sol de Hidralia, ha asegurado que intensificarán la interlocución con la patronal, para mantener reuniones semanales de seguimiento al buen resultado de esta actividad, en esta etapa de teletrabajo en estado de alarma. Por parte de Endesa, Benito Valentín, responsable de nuevos suministros de Andalucía Este, ha confirmado que se seguirá trabajando "de manera estrecha" con la ACP, como ya se viene haciendo los últimos meses, garantizando que los equipos están concienciados y alineados con estas directrices para eviten retrasos excesivos en la resolución de expedientes.
La ACP, tras esta reunión, ha valorado "muy positivamente" la disposición de todos, esperando que los resultados de los próximos días confirmen "esta buena sintonía". En su opinión, será "la única forma de que la actividad y el empleo no se resientan en exceso".
Los constructores han lanzado especialmente un mensaje de auxilio a las administraciones locales, para que "entiendan que tienen la obligación de no ignorar esta llamada con medidas, que requieren de intensidad en organización, decisión y determinación, pero que no exigen coste a las arcas públicas, sino todo lo contrario; serán también nuevos ingresos de nuestros ayuntamientos".
