­Los que ha traído esta crisis del coronavirus son días inéditos para todos. Esta situación excepcional se refleja en las rutinas de los alcaldes, obligándolos a alternar el recogimiento en el domicilio con visitas al despacho. Viven entre la casa y el Ayuntamiento. Así afrontan el confinamiento los regidores José María García Urbano (Estepona-PP), Antonio Pérez (Alozaina-PSOE) y José Joaquín García (El Burgo-IU).

José M. García Urbano (Estepona)

«Estos días están siendo especialmente difíciles para todos por el impacto social y económico que esta pandemia está teniendo en la sociedad. Los ayuntamientos somos los que estamos en primera línea atendiendo a los ciudadanos y por ello somos plenamente conocedores del sentir del nuestros vecinos. Sufrimos sus preocupaciones en primera persona. Como alcalde, siempre he luchado por contribuir a una Estepona mejor y ahora le transmito a todos mis vecinos que siempre me van a tener a su lado y a su servicio de una forma incansable e incondicional. La actividad municipal no se ha detenido y hemos continuado avanzando en los proyectos que teníamos iniciados. Si bien, nuestra prioridad y nuestros ojos están puestos en todos los ciudadanos que necesitan ayuda. Hemos dado carácter ilimitado a la partida económica presupuestaria de ayudas de emergencia social para que ningún ciudadano tenga desatendidas sus necesidades básicas. Vamos a reactivar la iniciativa pionera implantada en 2012 de adjudicación directa de obras menores y servicios únicamente a empresas de Estepona y vamos a fijar como criterio preferente en las adjudicaciones de licitaciones públicas que las empresas aporten el 0,7 por ciento de esos contratos a fines sociales en la localidad. Entre las acciones más relevantes, estamos trabajando intensamente en el procedimiento administrativo que permita, el día después de que se acabe el estado de alarma, empezar a movilizar un total de 80 millones de euros en inversiones productivas en la ciudad que generen empleo y dinamicen la economía local. Esta crisis está sacando lo mejor de muchas personas y Estepona está demostrando ser una ciudad solidaria y ejemplar. Por ello, tengo que mostrar mi orgullo por mis vecinos por el cumplimiento de las medidas y tengo que enviar un reconocimiento a todos los profesionales que están trabajando y ayudando a vencer esta pandemia. Su ejemplo nos hace recordar cada día que hay que seguir luchando con todas nuestras fuerzas. Estoy convencido de que afrontaremos el futuro con esa fuerza y con optimismo. Sobre el funcionamiento del Ayuntamiento, tengo que decir que no se ha visto alterada la prestación de servicios, ya que con la implantación de la administración electrónica, los ciudadanos pueden seguir haciendo gestiones y la plantilla municipal continúa trabajando mediante teletrabajo. Todo ello ha permitido que se haya remitido para aprobación dos nuevos tramos de corredor litoral, se haya concedido la licencia de obra para la construcción de más de un centenar de VPO, se hayan concluido los proyectos de ejecución del aparcamiento de la plaza del Ajedrez y de la remodelación integral de 11 calles de la ciudad y del primer tramo del paseo marítimo. En relación a cómo ha cambiado la forma del trabajo en estos días, gracias a las posibilidades que nos ofrecen las tecnologías y esa administración electrónica puedo estar todo el día conectado con el equipo y el personal que conforma la Corporación; con los compañeros de la FEMP, donde también hemos adoptado importantes medidas y propuestas económicas dirigidas al Gobierno central; y con los ciudadanos, con quienes estoy en contacto a diario a través de los mensajes privados que me dejan en todas las redes sociales. En especial, en Facebook. A nivel personal, el confinamiento nos está permitiendo pasar más tiempo en casa y compartir más tiempo en familia y con mis cuatro hijos. Esta situación me ha permitido recuperar el ambiente familiar de otros momentos».

Antonio Pérez (Alozaina)

«Son circunstancias muy diferentes a aquellas en las que se suele trabajar con normalidad. Esa es la gran diferencia. Todo es diferente. Ahora tenemos más trabajo, pero también porque se trata de algo más difícil de afrontar. De algo que no va dentro de la lógica. Hay jornadas en las que cargo dos o tres veces la batería del teléfono móvil. Antes de la declaración del estado de alerta, ya estábamos desinfectando todo el municipio con medios mecánicos. Ahora, lo hemos ido perfeccionando y lo hacemos también con atomizadores porque queda mucho mejor. No solo va al suelo, todo lo que coge a su paso lo va desinfectando tal y como nos aconsejaron las autoridades sanitarias. Con hipoclorito sódico para cumplir la misión de matar al posible 'bichito' dónde esté. La respuesta de los vecinos de Alozaina es inmejorable. El nivel de concienciación es enorme. La Policía y la Guardia Civil también están haciendo un gran trabajo. Yo voy al Ayuntamiento cada vez que es necesario. Y tengo que conciliar también porque mi mujer teletrabaja y tenemos un niño de año y medio».

José Joaquín García (El Burgo)

«Todos los servicios del Ayuntamiento están funcionando con el teletrabajo, excepto Alcaldía y la recepción de llamadas. Al principio, estábamos saturados de información y luego se ha normalizado un poco todo. Antes de la declaración del estado de alarma, iniciamos la desinfección de los parques y de los alrededores del colegio. Ahora, cada tres días pasamos con tractores por todo el casco urbano y el extrarradio. Allí donde haya viviendas, desinfectamos. Hay que destacar la labor de un grupo de voluntarios que ha hecho mascarillas para todos los vecinos. Hay que mencionar también el trabajo de Protección Civil. Se encargan de repartir las tareas escolares, les llevan medicamentos a las personas mayores o animan a los niños. Por las tardes, salen con el 'cantacuentos' y les ponen por el altavoz una o dos canciones y ellos se entretienen. Los niños están más concienciados, incluso, que los mayores. Para ellos, es un bicho que está en la calle y hasta que no lo pesquen no se puede salir. Además, hemos hecho algún vídeo para enviar un mensaje de tranquilidad. De momento, no hay ningún caso confirmado pero no podemos relajarnos».