El colectivo de celadores del Hospital Regional de Málaga se siente indignado. El sindicato UGT ha informado de que al comienzo de esta crisis, el procedimiento de actuación frente a casos de infección por el nuevo coronavirus del Ministerio de Sanidad, incluso en su última versión de 11 de abril, establecía un uso de los correspondientes EPIs que no se han cumplido en el caso de los celadores.

Por otro lado, el documento técnico Manejo clínico del COVID-19: atención hospitalaria, también del Ministerio de Sanidad, establece un uso totalmente distinto de los EPIs a usar por los celadores. En este documento se indica que una mascarilla quirúrgica es suficiente. Esta contradicción sucede con todos los protocolos que se han ido publicando, donde el nivel de exigencia en el correspondiente EPI ha sido "suavizado".

Aún así es difícilmente explicable que para el traslado en ambulancia de un caso sospechoso de Covid 19 el documento técnico Prevención y control de la infección en el manejo de pacientes con COVID-19, en su versión de 14 abril, establezca que para el conductor de la ambulancia (con separación física entre conductor y paciente), se use un EPI "acorde al riesgo" y para el celador que lo recibe en el hospital y lo traslada a la habitación de ingreso sea suficiente una mascarilla quirúrgica.

Además de todas estas incongruencias, los celadores del Hospital Regional ahora tienen que lidiar con la infracalidad de las mascarillas. Si bien el resto del personal sanitario recibe material homologado, ellos están siendo equipados con material procedente de donaciones particulares, que son muy bien recibidas, pero que deben darse otro uso, no para garantizar la seguridad de los trabajadores 7 horas al día.

La Sección Sindical de UGT del Hospital Regional se pregunta, si no existe déficits de material, dónde se encuentra.