La cárcel de Málaga acumula 29 reclusos fallecidos en los últimos cinco años, según datos aportados por el Gobierno en una respuesta parlamentaria al senador de Compromis Carlos Mulet, quien pidió una relación de las persoans fallecidas en ese período en los centros penitenciarios españoles. La prisión de Morón de la Frontera (Sevilla) es la que más decesos concentran, con 47 muertes.

Un total de 863 reclusos murieron en las prisiones gestionadas por la administración central del Estado en dicho periodo, con 2018 como el año más trágico, con 210 fallecidos, sin contar los de Cataluña que están controlados por la Generalitat.

Según la información del Ejecutivo, 2015 se saldó con 155 personas fallecidas en prisión y 2016 con un total de 157, mientras que al año siguiente la cifra se redujo hasta los 147. Tras este descenso, en 2018 volvió a subir hasta las 210 muertes, la cifra más alta desde 2009 y que supone un 42,9 % más que en 2017.

A estos datos se suman las muertes que tuvieron lugar en 2019 que, aunque descienden respecto a 2018, se quedaron en un total de 194 personas fallecidas, lo que supone casi 4 muertes a la semana de media.

En todo el quinquenio, la cifra de fallecidos alcanzó los 863, lo que supone 81 personas más en comparación con el periodo 2010.2014.

Además, este aumento de las víctimas choca con la reducción del número de reclusos, ya que en 2015 se registró una media de 55.415 personas en las cárceles y a lo largo del lustro se ha ido reduciendo paulatinamente hasta que hasta los 50.635 del año pasado.

En cuanto a las cárceles donde más internos han perdido la vida en estos cinco años, es la de Sevilla 2 de Morón de la Frontera la que encabeza la lista, con 47, seguido del centro penitenciario de Aranjuez (Madrid VI), con 37, y la cárcel de León, con 35.

Precisamente, una gran parte de los fallecidos en el centro leonés corresponde al año pasado, cuando murieron 14, la mayor cifra en una cárcel durante un año en este lustro.

La cárcel de Málaga, la de Sevilla 1 y el centro penitenciario Puerto III de Cádiz acumulan 29 muertes cada una, lo que sumado al resto de prisiones convierten a Andalucía en la comunidad con más fallecidos, si bien es la autonomía que alberga más centros penitenciarios (14).

La media de edad de los reclusos fallecidos es menor de 50 y la causa fue muerte natural en el 54,4 por ciento de los casos, en tanto que el consumo de drogas lo fue en el 25,1 por ciento y el suicidio en el 15,8 por ciento.

El resto de las muertes, aunque en un porcentaje muy bajo, están originadas por accidentes, el VIH y las agresiones.