Un policía nacional destinado en la Comisaría Provincial de Málaga ha muerto la mañana de este jueves tras varias semanas ingresado en la UCI por coronavirus. Se trata del inspector Sebastián Sabariego Rievero, de 54 años y que hasta ahora desempeñaba su labor en la Brigada de Policía Científica. Sus compañeros lo definen como «un gran currante» y una «bellísima persona», por lo que la noticia ha causado una gran conmoción en la plantilla. A mediodía, la Comisaría Provincial le ha rendido un emocionante minuto de silencio por el compañero caído, que deja dos hijos de 18 y 22 años.

Natural de Sevilla, Sebastián era un amante de la lectura, la historia y el cine clásico. Inició su carrera profesional en el Cuerpo Nacional de Policía en 1987 y su primer destino, Cataluña. En 1991 fue trasladado a Málaga a la Brigada Provincial de Policía Científica, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional. Desde 1996, ascendió en las diferentes escalas del cuerpo hasta desempeñar desde 2013 como inspector un puesto de especialista superior en la Policía Científica. A lo largo de su trayectoria fue distinguido con una Cruz al Mérito Policial con distintivo blanco y casi un centenar de felicitaciones públicas.

La Policía Nacional, a través de sus redes sociales, ha querido recordar su figura. "Sentimos profundamente el fallecimiento de Sebastián, inspector de la Policía Nacional que nos ha dejado a los 54 años, en Málaga, víctima de la #Covid_19. Un fuerte abrazo a su familia y seres queridos. DEP", han publicado en su cuenta nacional de Twitter. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también se ha sumado a las muestras de pésame. "Sebastián llevaba 31 sirviendo a los españoles en la Policía, descanse en paz", ha señalado.

La muerte del inspector es la primera que se registra la Policía Nacional en Málaga y la segunda de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desde el inicio de la crisis por la Covid-19, ya que el 9 de abril se conoció el fallecimiento de Francisco Martín, un guardia civil destinado en el Destacamento de Tráfico de Antequera. El agente perdió la vida tras semana y media en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), cumplió 40 años de servicio y fue Caballero Legionario.