Ignacio López lanza un mensaje positivo y agradece a los españoles todo el esfuerzo que han hecho para que el país haya podido llegar ya al plan de desescalada diseñado por el Gobierno que preside Pedro Sánchez. A la vez que las críticas a Pablo Casado afloran omnipresentes, el diputado malagueño también quiere confiar en la mano tendida de Ciudadanos o le pide a Vox «mesura»

¿En qué términos valora la gestión del Gobierno ahora que se ha iniciado la desescalada?

Es de justicia que la valoración general se haga cuando termine todo. Respecto a la evaluación continua, creo que se está haciendo bastante bien dadas las circunstancias. Es un escenario de incertidumbre y un virus desconocido.

¿Qué opinión le merece que, tras desvelar Pedro Sánchez el plan de desescalada, profesionales de la hostelería y del turismo de Málaga reaccionaran en tromba considerándolo insuficiente?

Todo lo que no sea la actividad económica al 100% puede ser entendido como insuficiente. Se está intentando hacer de forma gradual. Había otra opción que era hacerlo todo de golpe en la cuarta fase. Entiendo la preocupación del sector y que los afectados sientan esa impotencia. No habrá soluciones perfectas hasta que recuperemos la normalidad. Hay que tener en cuenta el muro de salud pública en el que nos movemos y esa es la prioridad. Ya que hemos conseguido librar una primera batalla, existe la esperanza de que también ganemos esta segunda batalla de recuperación de la actividad. Será duro, pero lo conseguiremos si lo hacemos tan bien como hasta ahora.

Es muy activo en ciertas redes sociales y todo lo que hace el Gobierno le parece bien, ¿se expresa así porque gobierna su partido o porque realmente lo piensa?

Todo lo que digo lo pienso. Aunque eso no significa que todo lo que piense lo diga. Evidentemente, en mis redes tengo sesgos. No soy portador de la verdad. Soy portador de mi forma de verlo y entenderlo. Y puedo comprender que otros tengan otra visión diferente. Además, hay que tener en cuenta que los mensajes en las redes sociales tienen una limitación de espacio y que, en gran medida, las uso como el diputado del PSOE que soy.

¿Qué le molesta más del comportamiento de la oposición?

Me preocupa el comportamiento político de la derecha de nuestro país. Hay que mirar al Gobierno con una doble perspectiva, atendiendo a cómo y en qué circunstancias lo está afrontando y a con qué oposición lo está afrontando. La derecha está siendo absolutamente desleal no sólo con el Gobierno, también con el Estado y con la administración pública. Ya me gustaría que el Partido Popular a nivel nacional fuera sólo la mitad de leal que el PSOE andaluz lo está siendo con el Gobierno regional. No es razonable que la derecha esté más pendiente de cómo derribar al Gobierno que de cómo vamos a vencer al virus.

¿Qué le diría a los diputados de Vox que han culpado directamente al Gobierno de las muertes por el coronavirus?

Les podría decir muchas cosas. Deberían pensar que están ejerciendo una responsabilidad pública. Y que el Congreso y el ágora pública no son la barra de una taberna. Y que sus palabras tienen consecuencias públicas. Y que quien mata es el virus. Decir otra cosa es enfangar la vida pública de nuestro país hasta límites que desconocíamos. Le pediría la mesura y la responsabilidad que merecen el cargo que ejercen. Son responsables públicos. Que se comporten como tal.

El diputado malagueño de Ciudadanos Guillermo Díaz, a quien conoce desde la Universidad, insiste en la necesidad de tenderle la mano al Gobierno y recuerda que no es la primera vez que tienen ese gesto con el PSOE ¿se fía de los guiños que está haciendo el partido naranja?

Me gusta siempre confiar en el ser humano. Confío en que la nueva dirección de Ciudadanos vire más a la cooperación y menos a la confrontación por la confrontación. Creo que Ciudadanos debe recuperar su esencia si quiere volver a su capacidad para tener una representación importante en nuestro país. Quiero confiar en que es cierto. Necesitamos, en esta época sobre todo, que haya ánimo de entendimiento. Y Ciudadanos está demostrando que lo tiene. Que es lo que está haciendo en esta etapa. Que está más por tender manos que por morderlas continuamente, que es lo que hacía antes y es lo que hace ahora el PP.

¿Está siendo la Junta de Andalucía tan leal al Gobierno como presumen sus gobernantes?

Podría serlo más. Sobre todo, ante la mano tendida que tiene del PSOE andaluz. La falta de lealtad, cuando se ha producido, ha venido por la propia zancadilla que el propio Pablo Casado impone. Todo es mejorable pero es verdad que aquí se está dando con el PP andaluz más coordinación que la que se está dando con el PP nacional. Aquí en Andalucía se está consiguiendo cierta colaboración, que me gustaría que fuera más. No lo puedo negar. No pido que anulen la crítica, si lo hago no sería democrático. Pido que la crítica sea constructiva. Que no se critique para destruir. Cometer errores en una situación así tan nueva es normal y que la oposición lo critique también es normal. Pero también debe aportar ideas. Sólo le pido al PP andaluz que sea riguroso. Aún no le hemos ganado del todo al virus. Tiene que haber un criterio de seguridad sanitaria a la hora de proponer cosas.No quiero entrar en una polémica. Creo que, en esta nueva fase, tiene que haber un entendimiento entre el Gobierno de España y las comunidades. Ha llegado el momento de que las comunidades y los ayuntamientos arrimen más el hombro. Hasta ahora, con el mando único, el Gobierno se lo había echado todo a sus espaldas y las demás administraciones se han quedado en un segundo plano. El Gobierno lo ha soportado todo ante la opinión pública porque creía que era lo que debía hacer, hasta cuando no era su responsabilidad competencial. Pero, ahora, comunidades autónomas y ayuntamientos deben dar un paso al frente en aquellas materias que son de su competencia. De momento, no están diciendo nada. Vemos poco plan y todo el mundo debe arrimar el hombre con propuestas que sean factibles y con seguridad. Yo deseo que la actividad económica empiece mañana. Toda. ¿Pero es posible? No

¿Es optimista o pesimista respecto a la lucha que se mantendrá a partir de ahora contra la pandemia y sus consecuencias ?

Soy optimista. Tenemos motivos para pensar que saldremos de esta. Hay esperanza en el medio plazo si lo hacemos bien y los escenarios que se plantean se pueden cumplir. Los ciudadanos deben seguir respetando la distancia social, lavándose las manos y usar mascarillas cuando sea posible. No va a ser fácil pero vamos a salir de esta. Está siendo duro y hay gente que, incluso, se ha quedado sin ingresos. Hay gente pasándolo mal. Hay que reconocer el esfuerzo que la gente está haciendo. Hemos salido de la curva por el esfuerzo de la gente. Y vamos a salir con un Gobierno que ha tejido un escudo social y ha sostenido el tejido productivo con créditos ICO. Tenemos que salir en condiciones en las que no nos ahoguemos.

¿Qué le parece que en los balcones haya aplausos de apoyo y, a veces, caceroladas de protesta?

Lo que me apena es que haya quien intente boicotear o suplantar los aplausos, que se establecieron en todo el país como un reconocimiento social a los sanitarios. Que incitando a otro tipo de manifestaciones públicas se intente enfangar eso me apena. A otra hora lo respeto. No me gusta pero vivimos en un país libre. Entiendo que se haga. Hay que normalizar que la crítica o la cacerolada puede existir.

¿Le gusta que se refieran a usted con la etiqueta de sanchista?

Llevo tanto tiempo con esa etiqueta que me he hecho a ella y ni me lo planteo. Soy diputado socialista y del equipo de Pedro Sánchez. Pero nunca me ha gustado ponerle etiquetas a las personas. Soy militante y diputado del PSOE. La de socialista es la única etiqueta que me acompañará siempre. La etiqueta de sanchista ya solo la usan los medios de comunicación. En mi vida cotidiana no está presente.

José Luis Ruiz Espejo asegura que la distancia entre susanistas y sanchistas va a dejar de existir...

Me gusta escuchar esas cosas porque todos somos del PSOE. Desde el minuto 1 he actuado y lo he sentido así. Todos estamos al lado de este Gobierno y del presidente Pedro Sánchez, que tanto está haciendo para encontrarle una salida a esta crisis.