Nueva dimisión en el seno de Vox Málaga por discrepancias con el Comité Ejecutivo Provincial. El vicesecretario de Comunicación del partido en la provincia, Enrique Canivell, ha renunciando a su cargo y dejará de estar vinculado a la directiva provincial que tiene al frente, como presidente, a José Enrique Lara.

Tras ser preguntado al respecto por La Opinión de Málaga, Enrique Canivell aseguró que su marcha no le resulta «agradable», debido a «discrepancias en torno al desarrollo de mi labor profesional con el Comité Ejecutivo Provincial, encabezado por su presidente José Enrique Lara».

«Desde mi posición como vicesecretario de Comunicación de Vox Málaga, y siempre tratando de mantener mi ética profesional y mi neutralidad, he intentado que esta etapa fuera lo más provechosa para el partido y para la sociedad», añadió Canivell.

Asimismo, el exvicesecretario de Comunicación de Vox Málaga le dio las gracias a todos los profesionales y miembros del partido que han trabajado con él, «desde afiliados de base entregados por una causa, pasando por concejales, parlamentarios autonómicos y diputados nacionales». «Y, de una manera especial, le doy las gracias a la vicesecretaría nacional de Comunicación de Vox, que siempre me ha tratado con respeto y profesionalidad, y le deseo lo mejor en el desarrollo de su labor», señaló Enrique Canivell.

Crisis interna

La crisis interna, que lleva al menos un año y medio latente en Vox Málaga, reapareció a finales del pasado año 2019 tras la lógica 'tregua' que interpuso la convocatoria de las elecciones del 10-N. Después de estos comicios nacionales, en los que el partido de Santiago Abascal estuvo muy cerca de convertirse en la segunda fuerza de la provincia a menos de un millar de votos del PP, el sector crítico de la formación comenzó a movilizarse para disputarle el poder provincial al presidente, José Enrique Lara, en unas hipotéticas primarias. Sin ir más lejos, militantes malagueños de la formación de derecha comenzaron entonces a recabar apoyos para distintas candidaturas que siguen trabajando para enfrentarse al actual presidente provincial en unos comicios internos, cuando sean convocados por la dirección nacional.

Dimisiones anteriores

La crisis interna que vive Vox en Málaga, donde se han registrado al menos una quincena de dimisiones de importantes cargos provinciales, encuentra sus orígenes en la antesala de las elecciones autonómicas andaluzas celebradas en diciembre de 2018.

Entonces, Antonio Calle presentó su carta de dimisión del Comité Ejecutivo Provincial (CEP) y, a partir de ahí, se produjeron nuevas renuncias y él se erigió en uno de los exponentes más reconocibles del sector crítico.

Calle, acompañado por otros partidarios de su corriente como Julia Calleja, hizo visible a través de varios carteles la petición de una gestora que se hiciese cargo del partido en la provincia, durante el mitin que reunió en Ciudad Jardín a unas 3.000 personas, en la campaña de las elecciones generales de abril, con la participación de Javier Ortega Smith, José Antonio Ortega Lara e Iván Espinosa de los Monteros. Además, Calle llegó a hacer un llamamiento de cara a las elecciones municipales para que simpatizantes y militantes de Vox no votaran a José Enrique Lara, candidato a la alcaldía de Málaga, sino al regidor del PP, Francisco de la Torre.

Precisamente, el resultado obtenido por la candidatura que encabezaba Lara en la capital malagueña fue considerado uno de los grandes fracasos de la fuerza de derecha, ya que no obtuvo representación.

Además, otras de las causas esgrimidas entonces por el sector crítico y que se tradujo en una gran oleada de dimisiones fue la actitud de Lara ante las polémicas vividas en el seno de la formación en la provincia. En concreto, por el paso al grupo de no adscritos en Torremolinos de Lucía Cuín, que resultó determinante para la elección del alcalde socialista José Ortiz; o por la pérdida de un concejal en Mijas, ya que Carlos Rivero fue expulsado tras aceptar el acta de edil que en un principio había rechazado en vísperas de los comicios.

Tras los sufragios locales de mayo, en Vox Málaga se vivió un verano especialmente movido con la oleada de dimisiones formalizadas por sus coordinadores en distintos distritos de Málaga capital y varias ciudades de la Costa del Sol. Una de las marchas más significativas fue la del tesorero y vicesecretario provincial de afiliados, José Luis Jiménez.

Posteriormente, la número 2 de Lara en la lista al Ayuntamiento de Málaga y vicesecretaria de Comunicación, la periodista Sonia Crespo, también abandonó la disciplina del partido a nivel provincial y pasó al sector crítico durante el mes de agosto.

Asimismo, en junio, el también dimisionario Martín Ortega inició los movimientos necesarios para que se interpusiera una moción contra José Enrique Lara.

Antes, en relación a los comicios generales de abril, también se produjeron sonadas salidas como las del entonces secretario general, José Manuel Rojas, quien se perfiló para encabezar la lista al Congreso de los Diputados por Málaga y, finalmente, se marchó cuando el presidente provincial apostó por la a la postre diputada Patricia Rueda como la persona elegida. Además, el número 4 de la lista que concurrió en primavera a esas elecciones, Antonio Díaz, también acabó dimitiendo.