El Ayuntamiento de Málaga ha elaborado un decreto, para el que ha contado con la colaboración de la Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos), por el cual va a autorizar a los hosteleros de la ciudad la ampliación de la ocupación de mesas y sillas en la vía pública cuando la ciudad pase a Fase 1.

Así señalan que dado que la ciudad de Málaga cuenta en la actualidad con un total de 8.000 bares y restaurantes que emplean a más de 30.000 personas y representa más del nueve por ciento del PIB de la ciudad, el Ayuntamiento, siguiendo el criterio de esta orden ministerial y aras de contribuir, en la medida de sus competencias, con la reactivación de la actividad económica de este sector, ha redactado y aprobado un decreto por el cual se autoriza la ampliación de la ocupación de la vía pública autorizada en la Ordenanza Reguladora de la Ocupación de la Vía Pública.

Así, la ocupación de la vía pública podrá verse ampliada, dejando obligatoriamente una línea de separación de dos metros entre mesa y mesa, por aquellos titulares que cuenten con autorización o en su caso, aquellos a los que, durante el plazo de vigencia de las restricciones sanitarias, les sea concedida.

En concreto, será de manera frontal, tomando como referencia la línea de fachada del establecimiento del local; o de manera longitudinal, manteniendo la distancia de seguridad suficiente respecto a pasos de peatones, accesos a inmuebles y garajes, y propiedades colindantes.

En un comunicado, el Ayuntamiento señala que se autoriza ampliar hasta el doble de la superficie que el titular tuviera concedida en la actualidad, de forma que está permitido ocupar la vía pública con el mismo número de mesas y sillas que cabían con anterioridad pero respetando la distancia de dos metros entre mesas.

También se permitirá la ocupación de las plazas adyacentes a los locales de hostelería y restauración, siempre y cuando en la vía en la que esté ubicada su ocupación no permita que pudiera ampliarse la superficie a ocupar y dadas las características de las calles se colocarán las mesas y sillas atendiendo a las instrucciones de la inspección de vía pública.

La ampliación de la ocupación permitida será posible si se deja en todo momento un paso peatonal libre no inferior a dos metros para tránsito, con separación de un metro de los portales de viviendas, accesos a garajes y vados, pasos de peatones, rebajes para personas de movilidad reducida, paradas de vehículos de servicio público, etcétera; así como de tres metros en pasajes y calles peatonales para el acceso de vehículos de emergencia, siendo de cuatro metros cuando la calle sea de preferencia peatonal.

Estas medidas decretadas por el Ayuntamiento entrarán en vigor cuando se produzca la entrada de la ciudad de Málaga en la Fase 1 en el proceso de desescalada previsto por el Gobierno y permanecerán vigentes mientras dure el estado de alarma o las autoridades sanitarias determinen la vuelta total a la normalidad.

Por otro lado, desde el Consistorio han recordado que el Real Decreto 463/2020, del 14 de marzo, por el cual se declaró el estado de alarma, disponía entre su articulado la suspensión de la apertura al público de los locales y establecimientos minoristas, a excepción de los que proporcionan productos que la orden establecía como de primera necesidad; regulaba la permanencia en los establecimientos comerciales cuya apertura estaba permitida; y se suspendían las actividades de hostelería y restauración, permitiendo únicamente la prestación de servicios de entrega a domicilio.

De igual modo, en relación con este último supuesto también contemplaba la suspensión de las terrazas afectas a los establecimientos de restauración y hostelería.

La Orden 386/2020 del 3 de mayo, por la que, se flexibilizan determinadas restricciones sociales y se determinan, entre otras, las condiciones de desarrollo de las actividades de hostelería y restauración de los territorios menos afectados por la crisis sanitaria del coronavirus, regula en su artículo 12, la autorización a la reapertura al público de las terrazas limitando al 50 por ciento las mesas permitidas y que éstas mantengan la distancia mínima de al menos dos metros; la autorización al incremento de número de mesas, mediante permiso municipal; y la autorización de las reuniones en terrazas de un máximo de diez personas.