El nuevo Grupo de Asociaciones Solidarias Malagueñas, que aglutina a más de diez colectivos que reparten alimentos, se reunirá mañana viernes con el concejal de Derechos Sociales, Francisco Pomares, para plantearle la urgencia de recibir la ayuda económica del Gobierno central, y así poder continuar con esta labor, informó ayer el portavoz Curro López, presidente de la asociación de vecinos del barrio de Lagunillas.

El portavoz, que señaló que el grupo también ha pedido que a la reunión asista el alcalde, Francisco de la Torre, declaró que «de todas las ayudas que ha mandado el Gobierno central, publicadas en el BOE, a las asociaciones no nos ha llegado un céntimo, cuando no tenemos guantes, faltan mascarillas y de nuestros bolsillos tenemos que pagar los gastos, porque no nos regalan ni la gasolina, ni la luz».

Por otro lado se preguntó qué destino tienen estas ayudas, «que el Gobierno central entrega a la Junta de Andalucía y a los ayuntamientos y dónde está el medio millón de euros que el Ayuntamiento dice que se gasta cada semana, si nosotros, las asociaciones del barrio, somos las que damos de comer a la gente».

Curro López lamentó que la ayuda recibida no haya partido de las administraciones sino de entidades como la Fundación El Pimpi o la Colección Ifergan, a las que le agradeció su generosidad.

Como detalló, las asociaciones han trabajado sin descanso a raíz de la declaración del estado de alarma, y en buena parte de los casos han atendido a las familias aunque no las tuvieran registradas. «La Cruz Roja sólo atiende a los que ya están valorados, a los nuevos pobres los atendemos nosotros todos los días, por eso algunas asociaciones hemos triplicado los usuarios y no tenemos un duro», argumentó.

«He dado alimentos a todo el que tenía hambre, sin papeles, porque la gente tiene que comer», resaltó y recordó que las asociaciones «no vivimos del aire» y es hora de que reciban un dinero que les permita continuar repartiendo alimentos.