La progresiva vuelta a las rutinas que destrozó la pandemia del coronavirus también empieza a quedar patente en la política. Antes de ese marzo que lo cambió todo, Podemos se veía obligado a una 'nueva normalidad' con la que afrontar la abrupta salida de su líder andaluza, Teresa Rodríguez. Vistalegre 3 no pudo celebrarse como tal y para mayo y los albores del verano estaban previstas sendas citas congresuales a nivel regional y provincial que tuvieron que ser postergadas. No obstante, el proceso electoral de Podemos Andalucía ha echado a andar. Y el concejal del Ayuntamiento de Málaga Nico Sguiglia y la diputada provincial Maribel González figuran entre los malagueños que aspiran a formar parte de la directiva regional. Entre las precandidaturas ya formalizadas al Consejo Ciudadano Autonómico de Podemos también están las del número 3 de la lista de Unidas Podemos al Congreso de los Diputados por Málaga, el bombero Juan Ramón González Triguero; la edil rinconera Rosa Ramada; la que fuese propuesta para ser expulsada del partido por Podemos Málaga tras encabezar la lista de 'Podemos cambiar Málaga' Francisca Pascual; el representante del círculo de Palma-Palmilla Juan Miguel Jiménez; o el estudiante de 23 años Pablo Antonio Pérez. Estos dos últimos también han presentado candidatura a la coordinación autonómica, para la que se perfila la roteña afincada en Córdoba Martina Velarde.

Sguiglia, horizonte andaluz

Una vez que se supo que la concejala en Málaga capital Paqui Macías entraba en la dirección nacional del partido morado, otro de los movimientos que se esperaba -ya en clave andaluza- era el del otro edil morado, Nico Sguiglia. Con las pilas cargadas tras un reciente periplo en su Argentina natal en el que se afanó en ejercer como concejal 'telemático' cuando estalló la polémica por su viaje, Sguiglia se centrará ahora en el proceso que puede llevarle a pertenecer a la dirección regional como primer paso hacia una hipotética etapa en un futuro como parlamentario autonómico. Antes incluso de que se cumpla su objetivo, queda claro que el rosarino ha apostado a caballo ganador. Tras abandonar IU en el peor momento de la formación o estar en la lista del sector morado Anticapitalistas en Vistalegre 2 con los compañeros a los que ahora tilda de irresponsables, Sguiglia entendió que subirse al tren oficialista de Pablo Iglesias era la única salida que le garantizaba cierta prosperidad.

Deshojar la margarita

Que la representante de Podemos en la Diputación y edil en Alhaurín el Grande Maribel González también opte a ser elegida para el Consejo Ciudadanos de Podemos Andalucía deja claro que, finalmente, deshojó la margarita con un pétalo oficialista, pese a que en su momento se mostró cercana al 'teresismo'. El mismo camino han seguido los torremolinenses Rafael Herrero y José Manuel Piña, que también aspiran a este Consejo Ciudadano de Andalucía. Sus dilemas han sido los mismos que han debido afrontar todos los malagueños que se sintieron identificados con el sector Anticapitalistas. Fiel a esta propuesta y al deseo de Rodríguez de montar un nuevo partido se mostró desde el primer momento el coordinador provincial de Podemos, el arriateño Alejandro Serrato. Quien tampoco ha participado de los movimientos oficialistas ha sido la parlamentaria andaluza por Málaga Vanessa García, que últimamente se ha mostrado de lo más prolífica y visible, algo que incomoda tanto en el sector oficialista de Podemos como en Izquierda Unida.

La marca Adelante

El hecho de que el grupo de Adelante en el Parlamento de Andalucía esté controlado por los 'teresistas'-sin ir más lejos la propia Teresa Rodríguez es la portavoz y siempre han dejado claro que mantendrían sus escaños- abre una de las principales brechas en relación a la continuidad de esta denominación tal y como fue concebida. Cuando menos, puede que esté en vías de extinción o sea parcialmente rechazada la marca que fue empleada para la confluencia con la que Podemos e Izquierda Unida concurrrieron tanto a los comicios andaluces como a las municipales en numerosos ayuntamientos. Aunque hace unos meses, tras conocerse el órdago que el sector Anticapitalistas le lanzaba a Pablo Iglesias, afloró un poco más la diplomacia y la necesidad de permanecer unidos en Adelante Andalucía, ahora mismo en IU no se dan rodeos a la hora de pronunciarse sobre esta tesitura. Su coordinador regional, el malagueño Toni Valero, no niega ya que está en peligro, y quizás tenga fecha de caducidad, la marca Adelante tras la ruptura con Podemos de Teresa Rodríguez. «Lo que no veo en peligro, en ningún caso, es la confluencia entre IU y Podemos; la marca Adelante, en tanto haya actores que tomen rumbos diferentes, sí estará en peligro», asegura consciente de que el hecho de que la líder regional abandone Podemos marcará el devenir y producirá las divisiones lógicas. En esta dirección se manifiesta igualmente el coordinador provincial de IU en Málaga, Guzmán Ahumada, quien recuerda que «la apropiación de Adelante Andalucía por parte de una de las partes significaría el fin de este proyecto político», en clara alusión al sector Anticapitalistas. Está claro que en la izquierda malagueña se avecinan cambios en variadas direcciones con el efecto dominó que imprimirá el cisma andaluz de la formación morada.