Andalucía figura entre el grupo de comunidades autónomas donde se espera que una caída de la economía por debajo de la media debido al impacto de la crisis del coronavirus, según un informe publicado este martes por Funcas, que afirma que las regiones "con un menor peso en su estructura industrial de los sectores más afectados y mayor presencia del sector primario o de industrias menos vulnerables sufrirán, en principio, un menor impacto económico".

Así, el informe afirma que en el grupo de comunidades integrado por Extremadura, Castilla-La Mancha, Castilla y León, La Rioja y Andalucía (que logra recuperar parte del terreno perdido por el peso de la industria agroalimentaria) el PIB caería este año un 8,8%, frente al 9,5% de media nacional.

Las autonomías más perjudicadas serán las más orientadas al sector turístico: Baleares y Canarias, junto a Cataluña o Madrid, dada su composición estructural. Este grupo de autonomías podría registrar una caída del PIB del 11,3% en 2020.

"Paradójicamente, cuanto más débil sea la estructura productiva, menor será el impacto de la crisis, siempre y cuando el turismo no represente una actividad predominante. Es decir, los territorios menos perjudicados serán los que tienen un peso elevado de las administraciones públicas (que generalmente implica un tejido productivo escaso en relación al resto de actividades), así como las regiones con una industria de menor contenido tecnológico o menos orientadas a las exportaciones", comenta la Fundación de las antiguas cajas de ahorro integradas en la asociación bancaria CECA en el estudio, denominado "Impacto de la crisis del Covid-19 en las comunidades autónomas".

En cuanto al empleo, el estudio recuerda que el 23% de los trabajadores afiliados a la Seguridad Social durante los primeros meses del año en España se han visto afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) o despidos a partir de la declaración del estado de alarma a mitad de marzo. En Andalucía el porcentaje llega al 26,5% aunque lejos del 37% y 38% registrado en Canarias y Balares. En mayo, ya con el inicio de la desescalada, hubo un ligero incremento del 0,5% en la afiliación a nivel nacional, que en el caso andaluz fue del 1,3%.

Funcas detalla que todas las comunidades se han visto afectadas por la pandemia, "si bien el impacto territorial ha sido desigual puesto que depende de la dinámica sectorial y la crisis no ha afectado en la misma medida a todos los sectores". Funcas ha publicado el documento en un contexto en el que los indicadores de actividad apuntan a un desplome sin precedentes en el conjunto del país tanto por la contracción de la demanda interna como por el hundimiento de los mercados internacionales y, en especial, del turismo.

Segun la entidad, los servicios de mercado han sufrido un impacto más significativo que la industria, los servicios de no mercado o la agricultura. Dentro de los servicios, los más perjudicados son los de comercio, transporte, hostelería y actividades artísticas y recreativas.

En la rama de las administraciones públicas, sanidad y educación, sin embargo, el impacto "probablemente ha sido positivo". En el resto de servicios puede haber sido negativo, aunque en menor medida que en el primer grupo. Para Funcas, estos comportamientos indican que la respuesta de la política económica "no debería ser tanto territorial como sectorial".

La Fundación de la CECA estima que en 2021 el panorama será diferente, "ya que la recuperación será más intensa en los servicios más afectados por la crisis este año, lo que favorecerá especialmente a Baleares y Canarias". También cree que las comunidades con más capacidad de respuesta a un entorno cambiante tendrán mejores resultados a largo plazo, por lo que serán clave "políticas de apoyo a sectores vulnerables, con mayor atención en algunos de los pilares de la economía española como el turismo y la industria del automóvil, y medidas de fortalecimiento del tejido productivo".