El coronavirus seguía entre nosotros y así justifican las autoridades la necesidad de mantener la distancia social y el uso de las mascarillas, máxime con la reapertura del tránsito internacional de personas. La evidencia la representan rebrotes que, aunque controlados y rastreados, han disparado la mínima incidencia de nuevos contagios en la provincia.

De hecho, en las últimas 48 horas se han sumado 24 en la capital, ahora con 2.419 positivos, a raíz del clúster detectado en el centro dependiente de Cruz Roja. A falta de que los últimos casos confirmados puedan figurar en los registros oficiales, estos 24 nuevos contagios corresponden a las pruebas cuyos resultados se conocieron entre el martes (10 primeros positivos) y el pasado miércoles (14 más). Resulta llamativo que hasta el lunes en toda la provincia sólo se habían sumado nueve positivos en un plazo de cinco jornadas, lo que supone menos de dos casos diarios.

De esos dos se ha pasado a una docena. Como remarcan fuentes de la Junta, cualquier positivo tiene la misma importancia desde el punto de vista de la prevención. Al mismo tiempo se destaca, no obstante, que tener controlados y localizados los focos ayuda a evitar situaciones graves. De hecho, ninguno de estos casos ha derivado en ingreso en los hospitales.

Asimismo, fuentes de la Consejería de Salud y Familias recuerdan que el número de fallecidos en la provincia continúa en 287 casos y que va camino de cerrarse junio en la misma cifra de decesos del pasado 31 de mayo. También subrayan que con los últimos 37 curados apenas quedan 826 pacientes en la lista de casos activos, el 18% de todos los contagiados malagueños desde el inicio de la pandemia.