En la finca privada Hacienda Mellado de Cártama, el primer sitio donde actuaron los monitores medioambientales de Almijara, la vida ha florecido en forma de oasis para mariposas y abejas, suelta de camaleones, árboles y arbustos con flores.

Además de con plantaciones, la construcción de muros tradicionales de piedra y bancales se encargan de asentar el terreno y defenderlo de lluvias y escorrentías.

Es la llamada 'custodia del territorio', la recuperación de montes y tierras abandonadas en fincas públicas o privadas que mejoran el terreno y aumentan la biodiversidad, muy mermada por el monocultivo.

Si hace dos años la asociación Almijara, fundada en Málaga capital en 1987, era la única entidad de la provincia en llevar a cabo esta figura, ya son cuatro los colectivos que practican la custodia del territorio, algunos de ellos gracias a la propia Almijara, que el año pasado organizó un curso formativo de técnicos en custodia del territorio, patrocinado por la Diputación, la Noria y la Obra social la Caixa.

«Para nosotros es una herramienta potentísima, no sólo de mejora del medio sino de nuestra salubridad, porque necesitamos bosques, ecosistemas sanos, recuperar la biodiversidad que hemos perdido», destaca Miguel Ángel Barba.

Además, hace unos días Almijara presentó el mapa provincial de potencialidades de la custodia del territorio, también con el apoyo de las tres entidades anteriores, con 159 fincas -casi todas privadas- de35 municipios donde se podría implantar esta figura. El mapa, que puede consultarse en la web www.almijara.org, incluye Málaga capital: «Aparecen varias fincas de la zona del Puerto de la Torre, hacia Almogía, porque los propios propietarios son los que lo han propuesto». Entre los proyectos en el Puerto de la Torre estaría la recuperación de las eras tradicionales, explica Miguel Ángel Barba.

Como precisa, «esta es la primera fase, la segunda sería contactar con los propietarios e intentar mediar y asesorar».

Este año también tienen en marcha implantar la custodia del territorio en siete pueblos de Málaga, con el apoyo de la Diputación, gracias a los técnicos que formaron el año pasado. Así, en Monda ya hay un acuerdo para un parque periurbano; en Almargen, la recuperación de una finca municipal; y están en camino los planes para Almáchar, El Borge, El Burgo, Pizarra y Cuevas de San Marcos.

Además, Almijara está en contacto con pueblos de la Sierra de las Nieves -que pronto será Parque Nacional- para estudiar la implantación. Para Miguel Ángel , la custodia del territorio también puede crear puestos de trabajo y frenar la despoblación en Málaga.