Agosto suele ser el mes en el que los profesores recargan pilas para encarar tres trimestres frente a una quincena, veintena o incluso una treintena de niños. Sin embargo este año lo pasarán sumidos en borradores de protocolos anticovid-19. Para Sylvia Frey, presidenta de Asadipre en Málaga, el inicio del curso será todo un «reto» que se complicará sobre todo en los cursos de Infantil.
Se avecina un curso complicado, ¿mayor preocupación?
Los contagios son la preocupación mayor. Sabemos que es imposible el contacto cero y que no haya contagios es una tarea difícil porque no depende solo de la organización del centro. Esos niños por las tardes hacen sus extraescolares, van al conservatorio, van a clases de cualquier deporte... hay muchas conexiones y si hubiera un contagio va a ser difícil de controlar. Donde más miedo se tiene es en la etapa de Infantil, los niños tienen menos percepción de lo que es el no contacto y hace que sea más difícil de controlar.
En Málaga ¿hasta qué punto son diferentes las características de los centros?
En Málaga provincia, por la zona de la costa, las clases están masificadas, Benalmádena, Marbella... pero si te vas al interior, hay menos masificación. Dentro de la capital, no es lo mismo Teatinos, que las clases están colapsadas porque tienen mucho alumnado y las zonas más antiguas, en las que hay menos alumnado.
El consejero de Educación hablaba de una «presencialidad segura» con más profesores pero misma ratio. ¿Es viable mantener en una clase la distancia de seguridad y la mascarilla?
Depende del tipo de centro. Hay centros que tienen una ratio de 15 o 20 alumnos por clase, que es mucho más factible. Los hay que tienen sus clases más grandes, por ser más antiguos y los centros más nuevos tienen aulas más pequeñas... En principio se intenta hacer unos grupos burbuja para que esos niños no tengan que usar la mascarilla durante las clases. Y si se mantiene las distancia de seguridad tampoco tendrían que usar la mascarilla en clase. En lo que son movimientos del centro, la mayoría tendrá en el protocolo que sí se tendrán que poner la mascarilla, en la entrada, la salida o cuando van al baño.
¿Cómo serán esos grupos burbuja?
Los grupos de control pueden ser incluso dos clases. Cada centro lo organiza según su estructura. Si por ejemplo tiene un patio en el que no puede dividir y tienen que juntarse dos o tres grupos en un mismo horario, eso sería un grupo de convivencia. Serán alumnos que estén siempre juntos, con el mismo profesorado. Si alguien externo entrase en ese grupo, esa persona tendría que llevar la mascarilla siempre. Pero mientras están los del grupo de convivencia juntos no tienen esa obligación.
En cuanto al recreo, donde habrá que controlar mucho más, ¿se plantean horarios diferenciados?
Hay colegios que tienen muchísimo patio y pueden dividirlo para los distintos grupos por lo que el horario de recreo podrá ser a la misma hora. Pero habrá centros con menos patio o con una estructura que no pueda dividir y tendrán que tener distintas horas.
En colegios más pequeños, ¿podrían usarse espacios como biblioteca, gimnasio... para la docencia y garantizar la distancia de seguridad?
Puede ser, dependiendo del centro y del personal. Podrán hacer un desdoblamiento de las clases que tengan más numerosas y estar en otras estancias.
En el decálogo de la Consejería se habría la posibilidad a los centros de suspender la docencia presencial en caso de contagio. ¿Se ha reforzado la enseñanza telemática?
En septiembre, dentro del equipo covid habrá una persona de Sanidad, un contacto directo con el que tramitamos directamente. Esa persona decide qué grupos tienen que estar en cuarentena. Las instrucciones del 6 de julio indican a los profesores que tenemos que tener una programación que sea presencial y después una programación paralela telemática, en la que se insiste que esa programación telemática no es llevar lo presencial al ordenador sino cambio de metodología, del tipo de actividades para que sea realmente una enseñanza a distancia.
¿Qué ocurrirá con profesores o alumnos que pertenezcan a grupos de riesgo?
Sobre el personal que es de riesgo, Riesgos Laborales de la Delegación tendrá que dictar si está capacitado para estar en el colegio y qué medidas tiene que tener esa persona. Los niños más o menos igual, van a su médico de cabecera y le indica qué medidas especiales necesita mantener. Y en el caso de que fueran niños que no pudieran estar en el centro se optará por una educación a domicilio como se ha hecho siempre.
Desde las direcciones de los colegios ¿cómo afrontan el inicio de este curso?
Con incertidumbre, es un reto para todo el mundo. Lo afrontamos con miedo porque queremos hacer las cosas bien. Sabemos que no podemos garantizar un contacto cero pero es que eso no lo puede garantizar absolutamente nadie, ni una empresa o establecimiento. Desde luego, lo que más nos preocupa es Infantil.