El colectivo empresarial agrario Asaja Málaga ha criticado la decisión del Gobierno de Estados Unidos, presidido por Donald Trump, de "mantener los mismos aranceles con los que está castigando a los productores españoles" desde octubre del año pasado. La noticia, afirman, supone un "varapalo" para los agricultores y ganaderos malagueños y andaluces, que conservaban aún algo de esperanza en que la Administración Trump derogara la medida al concluir el periodo de consultas públicas acerca de la pertinencia de eliminar, mantener o incluso incrementar los aranceles actuales, derivados del conflicto con Airbus.

Asaja Málaga ha lamentado este jueves que "se haya perdido otra oportunidad para la eliminación definitiva de los injustos aranceles americanos a productos españoles como la aceituna de mesa, el aceite de oliva y el vino".

La organización, presidida por Baldomero Bellido, ha afirmado que "la incapacidad del Gobierno de España, la pasividad de la Unión Europea y las inminentes elecciones en EEUU" han sido "la tormenta perfecta que ha impedido el fin de este agravio".

"El trabajo realizado por el Gobierno de España, el país más afectado de la UE, no ha conseguido eliminar ninguno de los injustos aranceles, que si bien tendrán algunas modestas modificaciones para otros países como Grecia y Reino Unido, que han logrado sacar algún producto de la lista, se mantendrán sin cambios para los de nuestro país", ha apuntado. El valor de productos europeos sometidos a tasas arancelarias seguirá en 7.500 millones de euros, el 15% para productos aeronáuticos y el 25% para todos los demás.

La asociación ha explicado que, aunque Estados Unidos ha anunciado esta pasada madrugada el inicio de un nuevo proceso de negociaciones, los productores españoles de aceite de oliva y aceituna en verde seguirán soportando un arancel del 25%, mientras que los de aceituna negra, que ya estaban sometidos a un arancel antidumping previo desde junio de 2018, a los que luego se sumó el derivado del caso Airbus, mantendrán el 34,75%. También seguirán gravados también otros productos agroalimentarios como el vino, el queso, los cítricos o los productos cárnicos derivados del porcino.

Asaja Málaga considera que esta decisión, que ha sido comunicada por el responsable de la Oficina Comercial de EEUU, Joseph Barloon, "carece de todo sentido". "Si ya de por sí esta guerra comercial nunca tuvo nada que ver con la agricultura, a ello hay que sumar, además, la ineficacia de la modificación de los contratos públicos con España y Francia del avión A350, y que debían haber supuesto la retirada inmediata de los aranceles, puesto que los contratos que estaban en el origen del litigio se adaptan a las exigencias de la Organización Mundial de Comercio, con lo que tras este ajuste, los aranceles carecen de justificación", ha aducido.

El colectivo agario ha lamentado además "la incapacidad del Gobierno de España para pelear con esta razón de peso" y "la tibieza de la Unión Europea, que más allá de solicitar y de demandar a Washington la retirada de estos injustificados aranceles, no ha ejercido medidas de presión efectivas ni suficientes que hayan logrado la eliminación definitiva de estos gravámenes, que perjudican solo a los agricultores españoles y no a los italianos o griegos".

Para la asociación, el último elemento de esta "tormenta perfecta" ha sido la marcha de la campaña electoral estadounidense. A su juicio, los sondeos "no son muy favorables" para Donald Trump, "quien no ha querido mostrar debilidad en su irracional estrategia comercial, pese a la presión de un grupo de 13 senadores, tanto republicanos como demócratas, que solicitaron la retirada de los gravámenes a los productos europeos ante la aguda crisis económica que está padeciendo Estados Unidos por la pandemia de coronavirus".

Asaja recuerda que el sector de la aceituna de mesa es el más perjudicado por la política arancelaria estadounidense. Según sus datos, España, que hasta octubre de 2019 era el principal proveedor de aceituna de mesa de los Estados Unidos, ha perdido su liderazgo y se quedará muy lejos de las 100.000 toneladas que tradicionalmente venía exportando a ese país, al que se dirigía más del 20% de toda la producción nacional de aceituna de mesa.

"Las ventas han caído en picado en los últimos nueve meses, periodo en el que las aceitunas españolas han sido sustituidas por las de Egipto, Marruecos o Grecia, países a los que no se aplica el arancel extraordinario del 25%", han asegurado.

España es el principal productor y exportador de aceituna de mesa del mundo, mercado que genera un comercio valorado en 1.700 millones de euros. La superficie dedicada en España al cultivo de la aceituna de mesa es de casi 190.000 hectáreas, concentradas entre Andalucía y Extremadura.