Alcaldes de 31 municipios, incluyendo capitales como Málaga, Madrid, Valencia, Cádiz, Zaragoza o Santander, y de todos los partidos salvo el PSOE, reiteraron ayer su rechazo al decreto ley que recoge el acuerdo con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) sobre el uso de los remanentes y han exigido al presidente Pedro Sánchez que presente otro de forma 'exprés' que permita repartir un fondo de 5.000 millones entre los ayuntamientos, tengan o no superávit.

En una reunión telemática, los 31 alcaldes acordaron un documento en el se recoge que el fondo de 5.000 millones sea «justo e igual» para todos los ayuntamientos, que se reparta en función del criterio de población y no se creen condiciones que afectan a la contabilidad nacional.

Asimismo, piden que independientemente de que los ayuntamientos tengan o no ahorros -remanente- se reparta al igual que el fondo distribuido entre las comunidades autónomas, sobre las que no se ha considerado su situación económica. Ese criterio de reparto beneficiará a Zaragoza, cuyo alcalde es uno d elos promotores de la 'rebelión', ya que pasaría de los cero euros que le corresponderían con la distribución actualmente fijada los 71 millones, según precisó el regidor del PP, Jorge Azcón. También el real decreto exprés que proponen los 31 alcaldes de todos los partidos políticos excepto del PSOE, recoge establecer un fondo extraordinario de transporte para hacer frente al descenso de usos por la pandemia y poder prorrogar las inversiones financieramente sostenibles, además de flexibilizar la regla de gasto en 2020 y 2021.

Azcón abundó en que este apartado, el número 7 del documento acordado del real decreto exprés, «es el que de verdad solucionaría los problemas de los Ayuntamientos y de los vecinos de España». En rueda de prensa, Azcón avanzó que los alcaldes también han acordado acudir al Congreso de los Diputados. La fecha de votación está por decidir, pero sería entre el 10 y el 14 de septiembre porque es el plazo máximo de convalidación. «Queremos que se nos escuche y todos los alcaldes que puedan el día que se vote la convalidación del real decreto iremos a que se escuche nuestra voz en el Congreso porque hemos pedido diálogo y no hemos tenido respuesta. Diremos de viva voz a la ministra de Hacienda que es injusto el reparto y necesitamos un decreto que solucione los problemas de los vecinos y no los problemas de contabilidad de la ministra. Lo diremos desde la tribuna de invitados».

Justificó la petición de que el Gobierno de España apruebe un real decreto exprés que refleje lo que pide la «inmensa mayoría» de alcaldes y lo que cerca de 200 diputados nacionales en el Congreso pueden convalidar y que serían los partidos que representan a los alcaldes de la reunión virtual del martes. El alcalde de Zaragoza tildó el encuentro de «histórico» porque no hay precedente de una cita de tantos alcaldes, de tantos partidos que se pongan de acuerdo para firmar un documento con el que «defender a sus ciudades».

Narró que el «buen tono y las intervenciones propositivas» de los alcaldes que se sucedieron en el encuentro telemático, que comenzó a las 09.00 horas, «con la sana intención» de defender los intereses de sus ciudades y poner soluciones a los problemas de sus ciudadanos». A su parecer, esta situación, «debe abrir una profunda reflexión en el Gobierno de Sánchez» al argumentar que «si tantos alcaldes de tantas ciudades y partidos se ponen de acuerdo en que la solución de Sánchez es mala para las ciudades es evidente que la ministra de Hacienda debería hacer una reflexión de las soluciones que aporta a los ayuntamientos». «Lo que Sánchez ofrece creo que no son soluciones para nosotros, sino nuevos problemas que nos está creando».

En la videoconferencia estuvieron los 29 municipios que se han adherido hasta la fecha al manifiesto del pasado 7 de agosto contra el acuerdo de la FEMP y Hacienda (Alicante, Almería, Badajoz, Badalona, Cádiz, Córdoba, Girona, Granada, Lleida, Madrid, Málaga, Marbella, Murcia, Ourense, Oviedo, Palencia, Pamplona, Pontevedra, Pozuelo de Alarcón, Reus, Salamanca, Santander, Santa Cruz de Tenerife, Tarragona, Telde, Terrassa, Teruel, Valencia y Zaragoza) y otras dos ciudades que participaron como invitadas a la reunión, Barcelona y Torrelavega.