Andalucía es la región que más sube el precio del alquiler frente al año pasado: un 6,61%, fue la séptima autonomía con la mensualidad más cara para los inquilinos, por detrás de Madrid (1.697 €/mes), entre otras. En cuanto a las capitales andaluzas, Málaga fue la capital española en la que más creció el coste en julio, que alcanzó los 1.009 €/mes, la sexta renta media mensual más alta de todo el país.

Por su parte Huelva (-3,18%) arrojó la cuarta caída más intensa de España. Interanualmente, Jaén (5,04%) fue la cuarta capital que más se incrementó del país, mientras que Huelva (-8,43%) registró el cuarto descenso más señalado a nivel nacional. En el apartado de rentas medias, Jaén (479 €/mes) fue la quinta más asequible para los inquilinos a nivel nacional.

Respecto a las provincias andaluzas, Sevilla (1,95%) arrojó el noveno repunte mensual más importante del país. Por su parte, Jaén (-3,44%) ocupó el tercer lugar en la lista de descensos nacionales. De un año a otro, Córdoba (8,88%) registró la mayor subida de España, y Cádiz (-6,26%) fue la octava que más cayó del país. Con 444 euros de renta media mensual en agosto de 2020, Jaén fue la cuarta provincia más asequible de España. Por su parte, Málaga, con 1.208 euros de mensualidad media, fue la quinta más cara a nivel nacional.

Por su parte, el piso tipo de alquiler en España tuvo en agosto una superficie media de 111 metros cuadrados y una mensualidad media de 986 euros, subiendo un 1,11% mensual. Respecto a agosto de 2019, la subida fue del 0,91%.

Según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, "en el mes de agosto, grandes capitales de provincia como Barcelona, Madrid, Valencia o Palma de Mallorca arrojan mensualidades de alquiler sensiblemente más bajas que las registradas en el mismo mes del año pasado". No obstante, en muchas de estas plazas el precio del arrendamiento sigue siendo alto.

El experto indica que "estos ajustes no siempre van en la misma línea de la provincia a la que pertenecen dichas ciudades, lo que podría indicar que la demanda se está moviendo hacia otras localizaciones". Este cambio en la ubicación podría estar motivado, según el directivo por "la consolidación del teletrabajo, que permite que muchos empleados puedan desempeñar su jornada laboral desde cualquier punto de España, sin tener que residir en el mismo lugar donde se emplazan las oficinas de la compañía".

Igualmente, Font señala que la oferta de alquiler residencial se está nutriendo de producto nuevo. "Estos inmuebles que llegan al arrendamiento tradicional tienen como origen, bien viviendas del alquiler turístico, un mercado que actualmente no vive su mejor momento, bien de propietarios que sacan su activo del circuito de la compraventa porque el precio que pueden obtener en estos momentos está por debajo de sus expectativas".