Han pasado casi ocho meses y en la mente de muchos vecinos de Málaga continúan las imágenes que dejaron las fuertes lluvias de finales de enero en distritos como Campanillas, cuyo río homónimo -junto con otros arroyos- se desbordó y generó muchos daños materiales a residentes y comercios en la zona. Así, Adelante llevó ayer a la Comisión de Ordenación del Territorio una moción que propició que, tras una enmienda del PP, se acordara que el Ayuntamiento inste a la Junta de Andalucía «a acelerar» la revisión de los planes de inundabilidad del río Campanillas para adaptarlos, atendiendo a criterios técnicos, «a las previsiones de los efectos del cambio climático».

Eduardo Zorrilla, portavoz de Adelante y ponente de la moción, aseguró que no se deben conceder nuevas licencias de construcción, salvo las ya existentes, en terrenos de la zona y pidió que se estudie que el equipo de gobierno inicie un procedimiento de innovación del PGOU para calificar esos terrenos inundables aledaños al río, cuyo desbordamiento debido a la borrasca Gloria causó pérdidas importantes a 850 familias del distrito, como no urbanizables, lo que rechazaron el PP, Cs y Juan Cassá, edil no adscrito (ocho votos), frente a los siete que suman el PSOE y los ediles de la confluencia. Las construcciones de la zona han «estrangulado» el río Campanillas, dijo, y aseguró que el encauzamiento del río no resolverá por sí esos problemas. Mariano Ruiz Araújo, edil del PSOE, destacó que los planes de inundabilidad están obsoletos y «no se puede seguir urbanizando la zona».

El edil de Urbanismo, Raúl López, afirmó que está previsto hacer un parque fluvial, según el PGOU, ya que el Consistorio está pagando por obtener esos terrenos, e insistió en que se va a hacer el encauzamiento del río, «en cuarenta años el PSOE tuvo tiempo de buscar una salida sobre el encauzamiento del arroyo», atacó, y, añadió, esa es una de las soluciones para paliar los efectos de las inundaciones periódicas. El encauzamiento, dijo Zorrilla, por sí mismo no es suficiente. Finalmente, el primer punto, enmendado por el PP, salió adelante (pedir la revisión de la inundabilidad), el segundo, el de declarar no urbanizables los terrenos aledaños al río, quedó descartado (entre otras cosas, porque dijo López y destacó también Noelia Losada, portavoz de Ciudadanos, implicaría expropiaciones muy costosas para el Consistorio); y el tercero y último fue apoyado por todos los grupos y consiste en exigir a la Junta de Andalucía que intensifique las labores de mantenimiento y limpieza del cauce, eliminando vegetación foránea y dejando y reforzando la autóctona.