El Ayuntamiento de Málaga lleva años buscando que las universidades privadas se interesen por instalarse en la capital de la Costa del Sol. Hace apenas dos años, el alcalde, Francisco de la Torre, anunció la llegada de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) a unos terrenos de 40.000 metros cuadrados en la zona de El Pato, en la fachada litoral oeste, junto al Martín Carpena. Desde ese momento, la oposición se opuso a este movimiento porque la idea era una adjudicación directa con el pago de un canon anual. Las críticas fueron cada vez más furibundas por lo que consideraban críticas homófobas de sus responsables. Finalmente, se introdujo en la ecuación la figura del concurso al que podrían concurrir más universidades privadas. Así, ayer se dio un avance capital en este asunto: además de la parcela reservada en la zona de El Pato, junto al Martín Carpena, se ha elegido otra pastilla en Teatinos, con lo que Málaga contará, una vez se haga el concurso, con dos universidades privadas.

No en vano, el alcalde recibió ayer a Javier Cano, CEO de la Universidad Alfonso X El Sabio, que tiene interés por desembarcar en Málaga. De momento, se conocen las intenciones de esta institución y de la UCAM, pero el concejal de Urbanismo, Raúl López, asegura que son cinco o seis universidades privadas, todas ellas de primer nivel, las interesadas en venir a la ciudad. Con el pliego, del que se ha culminado el primer borrador pero que siguen muñendo los técnicos, se ofertarán esos dos suelos y habrá dos universidades privadas en la ciudad, porque en sus ofertas han de señalar la preferencia respecto de las parcelas. Cabe recordar que Ciudadanos, en el pasado mandato, optó por hacer un concurso para la concesión demanial de los terrenos de forma que no sólo pudiera optar al suelo de El Pato la UCAM, sino otras instituciones académicas interesadas. Urbanismo recogió y matizó esta postura hace meses, exploró la situación y constató que hay un enorme interés entre las universidades por venir a la ciudad, dice López, de forma que, en vez de ofertar un suelo, son dos los que se ponen en cartera.

Son dos parcelas muy parecidas: estas universidades buscan una pastilla de equipamiento para edificar en torno a 25.000 metros cuadrados de techo, de forma que la huella de la parcela oscile entre los 10.000 y los 15.000 metros cuadrados. En el caso de la de Carretera de Cádiz, son varias pastillas las que suman 40.000 metros cuadrados. Los proyectos habrán de versar sobre realidades potenciadas en la ciudad como las nuevas tecnologías, la innovación, etcétera. Cabe destacar que el proyecto de campus de la UCAM se centra en especialidades relacionadas con la Medicina y la práctica deportiva. Asimismo, las universidades podrán optar a las dos pastillas pero sólo se harán con una de ellas, ya que habrán de expresar las preferencias de suelo que tienen.