¿Qué razones le han llevado a concurrir a estos comicios internos para optar a la reelección como presidente del Comité Ejecutivo Provincial de Vox?

Nos presentamos porque creemos en el proyecto en el que hemos estado trabajando. Lo hemos implantado en casi toda la provincia y ahora queremos influir en la política de toda Málaga. Trabajaremos para que los malagueños puedan decidir.

¿Cuáles son las grandes metas que se ha marcado la candidatura que lidera?

Nuestro proyecto busca establecer las medidas de Vox en todos los municipios. Actualmente estamos en el 93% de la provincia y nuestro objetivo es estar en el 100%. El papel de los afiliados seguirá siendo fundamental, ellos son el eje central de nuestro trabajo. Nuestros afiliados se podrán reunir con los cargos electos cuando lo soliciten. Ellos escucharán y llevará a las instituciones su voz.

¿A qué cree que obedece el contraste entre los buenos resultados cosechados en las elecciones andaluzas y las generales en la provincia y fracasos como el de la candidatura al Ayuntamiento de Málaga de la que usted formó parte?

Nosotros hemos trabajado por y para Málaga desde el minuto 1. En apenas un año nos enfrentamos a cuatro elecciones obteniendo en todas ellas representaciones en las instituciones públicas. Nosotros no somos políticos de profesión, por lo que hicimos el trabajo de la mejor manera que pudimos. Es cierto que no obtuvimos representación en el Ayuntamiento de Málaga; pero hay que tener en cuenta que Francisco de la Torre no sólo se hizo con los votos de la derecha sino que también logró convencer a la izquierda. Nosotros seguiremos trabajando para influir en el ayuntamiento de la capital. Todo trabajo bien hecho tiene su recompensa.

¿Tiene el Comité Ejecutivo Provincial que usted preside buena parte de la culpa en ‘espantadas’ como la que protagonizó Lucía Cuín para apoyar al PSOE en Torremolinos?

Desgraciadamente nuestra formación no es diferente a otras en cuanto a tránsfugas. La inexperiencia nos ha podido jugar una mala pasada pero con la fuerza y el equipo con el que contamos actualmente estamos más preparados para hacer frente a personas que no creen y defienden el proyecto de Vox y anteponen sus intereses personales a la voluntad de los ciudadanos.

¿Qué cree que ha aportado Vox, a nivel nacional, en una situación tan compleja como la que ha traído la pandemia?

Nuestros diputados, parlamentarios, concejales y el propio Comité Ejecutivo Provincial (CEP) se han reunido con numerosas entidades, sindicatos y colectivos sociales para escuchar y elevar sus propuestas a las instituciones. Patricia Rueda y Rubén Manso han presentado en el Congreso de los Diputados proposiciones no de ley (PNL) tras reunirnos con sectores afectados. Vox ha dado voz a feriantes, autónomos y al sector del turismo, entre otros.

¿Se imagina a otro compañero que no sea Santiago Abascal liderando el partido a nivel nacional?

Santiago Abascal contó con todo el apoyo de los afiliados en el mes de marzo. Santiago ha creído, ha confiado y ha defendido este proyecto cuando nadie creía en él. Nuestro presidente representa a nuestro equipo y es un espejo en el que mirarse.

¿Le molesta que a su formación se le cuelgue la etiqueta de partido de ultraderecha?

Nosotros no somos de ultraderecha, somos de extrema necesidad. No me molesta lo que otras personas puedan decir. Mi equipo conoce el proyecto y sabe que nuestras propuestas han llegado a Málaga y a España para mejorar la vida de los ciudadanos.