El pasado agosto, Rafael Sánchez Durán cogió el testigo de Francisco Arteaga en la zona sur y se ha convertido en el nuevo director general de Endesa Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla. Liderar la apuesta de la empresa por la transición energética, por el desarrollo de las energías renovables, por el impulso de la movilidad sostenible y por la digitalización son algunos de sus retos.

¿Cuáles son los datos de consumo eléctrico que ha dejado Málaga este verano?

Durante los meses de julio y agosto se han registrado puntas de demanda elevadas en la provincia de Málaga debido a las altas temperaturas; sin embargo, no hemos superado el récord histórico, que sigue estando en 1.471 megavatios el 8 de enero de 2009. Lo importante en todo esto es la respuesta de la red de distribución de Endesa, que ha mantenido en todo momento un servicio sin incidencias destacables por sobrecarga. Todo ello gracias al excelente trabajo del equipo de Endesa en Málaga y al compromiso de la compañía con inversiones de mejoras, como los 148 millones de euros anunciados para el trienio 2021-2023.

¿Cómo influye el consumo en el cambio climático?

Estamos superando la capacidad de regeneración de los recursos naturales de la Tierra, por lo que el consumo actual no es sostenible. Más del 60% de este consumo corresponde a las emisiones de carbono, por tanto, es necesario llevar a cabo una transición energética justa que posibilite la descarbonización de la economía, y que priorice la electricidad generada por fuentes renovables como vector de ese cambio.

¿Cuál es el futuro de las energías?

En nuestra comunidad, sin lugar a duda, tenemos un futuro prometedor basado en las energías renovables fotovoltaicas. Andalucía cuenta con una posición inmejorable, con una latitud subtropical y abundancia de situaciones anticiclónicas que favorecen un grado de insolación muy elevada, con más de 2.800 horas de sol al año, sobrepasándose incluso las 3.000 horas en algunos puntos de la comunidad. Esto supone una situación competitiva de Andalucía muy por encima del resto de Europa. Además, la tecnología fotovoltaica ya está madura y ha superado la curva de aprendizaje, lo que posibilita que sea una tecnología económicamente viable, sin necesidad de primas o subvenciones.

¿Qué papel desempeña Andalucía para Endesa en este sentido?

Andalucía es estratégica para Endesa en el desarrollo de energías renovables. Ya lo anunció nuestro consejero delegado, José Bogas, en el Parlamento de Andalucía en su intervención en la Comisión para la recuperación económica y social de la región el pasado mes de junio, cuando confirmó la apuesta de Endesa para desarrollar a corto plazo más de 1.400 megavatios de capacidad renovable en la comunidad, lo que supone una inversión superior a los 1.050 millones de euros y más de 3.500 nuevos empleos.

¿Qué avances se están produciendo en la comunidad autónoma?

En Andalucía se han conseguido avances significativos como la aprobación por parte de Red Eléctrica de España de la red de Alta Tensión Caparacena-Baza-La Ribina, que viene a cubrir una demanda histórica de esa red de transporte en la zona oriental de Andalucía, o la aprobación por parte de la Junta de Andalucía del decreto de mejora y simplificación de la regulación para el fomento de la actividad productiva de la comunidad o la figura de los project managers para ayudar a reactivar la economía. Son grandes pasos que prometen dar su fruto y que esperamos que tengan un efecto añadido en el impulso de las renovables en el territorio.

De hecho, Endesa ya tiene un proyecto de ciudad europea abastecida de energía cien por cien renovable. ¿Cómo será la eCitySevilla?

La idea de eCitySevilla es adelantar los retos energéticos de las ciudades europeas 25 años, creando un modelo más eficiente y sostenible, basado en las energías renovables y en la electricidad. Se está desarrollando en la Isla de la Cartuja, en la ubicación de la Expo 92, y su finalidad es que este entorno, con más de 523 entidades, tenga en 2025 un suministro energético cien por cien renovable, a través de un parque de generación fotovoltaica y el desarrollo de grandes plantas de almacenamiento. Además, los 50 edificios de mayor consumo contarán con un consumo energético eficiente, tras un proceso de rehabilitación energética, y se fomentará la movilidad sostenible eléctrica. Todos los elementos anteriores crearían un sistema conectado y autónomo, con información compartida, que funcionaría gracias a una red eléctrica inteligente (Smart Grid) totalmente digitalizada, que permitiría una plataforma de datos en abierto para la gestión inteligente del parque.

En Málaga hay una Smartcity para buscar un modelo energético más eficiente y respetuoso con el medio ambiente. ¿Cómo está funcionando? ¿Qué resultados ha arrojado hasta el momento?

La Smartcity de Málaga ha sido la base para poder desarrollar la eCitySevilla y las próximas iniciativas asociadas a estas que pronto verán la luz. Desde su puesta en marcha en 2009, el Smart City Living Lab, que es como lo llamamos en Endesa, ha sido un laboratorio real para desarrollar medidas de eficiencia, ahorro energético y gestión activa de la demanda de particulares, edificios y grandes clientes. Como proyecto pionero, ha recibido visitas de expertos de 24 países de los cuatro continentes y ha conseguido captar la atención de muchas empresas del sector eléctrico, así como universidades de ámbito internacional. Ahora ha sido elegida como laboratorio de referencia del Grupo Enel, del que Endesa forma parte, para el desarrollo de tecnologías inteligentes de distribución en la red eléctrica (smart grids). Para nosotros hablar de Málaga supone el emplazamiento que ha dado origen a todo nuestro conocimiento alrededor de las ciudades del mañana.