La vuelta al cole no impidió una desescalada en el número de contagios por coronavirus detectados en la provincia durante las últimas semanas del mes de septiembre. Y dicha reducción en los positivos se extendió a todos los distritos de la provincia. Así lo demuestran tanto los datos facilitados a diario por la Junta de Andalucía, como el informe interno al que ha tenido acceso a este periódico y que manejan los máximos responsables de la Consejería de Salud y Familias.

«La incidencia de casos de Covid-19 en la provincia acusa un descenso importante desde comienzos de septiembre, tendencia que se mantiene hasta la actualidad, por lo que podría deducirse que la apertura de los colegios y la vuelta al trabajo finalizadas las vacaciones, no han supuesto un incremento de casos en la provincia de Málaga», es una de las conclusiones que la administración autonómica arroja. Cabe destacar la multiplicación de los test realizados en los últimos meses en suelo andaluz, al analizar la conclusión a la que llega la propia Consejería.

La Junta realizó en septiembre, en los tres laboratorios públicos de los hospitales de la provincia malagueña, un total de 60.068 pruebas PCR. Y según consta en las bases de datos oficiales, la progresión fue también constante a lo largo de este pasado mes. De13.490 pruebas realizadas en la primera semana, las autoridades subrayan que se pasaron a 16.595 pruebas en la última, entre los días 21 y 27.

Al referirse técnicamente a una «segunda onda epidémica» en vez de a la «segunda ola», como portavoces autonómicos han manifestado en las últimas semanas, la «tendencia en la provincia de Málaga ha sido ascendente y ha superado la tasa media de Andalucía a lo largo de los últimos meses y desde el inicio». Pero además también ha estado por encima de la media de España «desde finales del mes de agosto». Es decir, las perspectivas justo antes de la vuelta a las aulas no eran nada optimistas.

Punto de inflexión en Málaga

Los propios expertos, no obstante, aluden a que a partir de la segunda quincena de septiembre, ya con la habitual bajada en los movimientos derivados de las vacaciones estivales, «se produce un punto de inflexión a la baja en la incidencia de la provincia, manteniéndose la disminución hasta la actualidad».

Así los seis distritos sanitarios de la provincia y en su conjunto se sitúan en unos «valores cercanos» a la media de Andalucía. Y se pone el acento en el principal artífice de ese descenso, «la importante disminución de casos notificados en el distrito sanitario» de Málaga capital desde el inicio de septiembre.

En el sostenimiento de la media provincial en términos parecidos a la media andaluza contribuyó el distrito sanitario Costa del Sol, «estable en valores superiores a la media provincial durante el mes pasado». Y sigue también por encima de la media de la provincia el distrito del Valle del Guadalhorce, si bien es cierto que fue a finales del mes de agosto «cuando alcanzó su máxima incidencia».

Además, en esta parte de la provincia ha sido significativo el efecto del brote localizado en las instalaciones residenciales de Guaro, con hasta 11 fallecidos con la enfermedad del Covid-19 hasta este momento. Con dicho foco activo, esta comarca malagueña ha arrojado un «repunte» siempre por encima de la media provincial.

El contrapunto lo representan a lo largo de septiembre los restantes distritos sanitarios, en especial la comarca de la Axarquía porque en ningún momento se acercó siquiera a la media provincial en incidencia del coronavirus. La curva de casos se mantuvo a lo largo del mes muy por debajo y siempre paralela al promedio de los seis distritos. No ocurrió lo mismo con el de la Serranía de Ronda, que también registró rebrotes y numerosos casos a mediados de septiembre. Y en términos parecidos también se ha situado por encima de la media provincial la Vega antequerana, pero justo en los últimos días de este mes pasado.

De nuevo hay que buscar en un brote en una residencia de mayores, esta vez localizada en Cuevas del San Marcos, ese cambio en los parámetros de la comarca. Además, en estas instalaciones ya hay que lamentar un primer deceso.