La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 42 años y nacionalidad española por acosar telemáticamente y vigilar, supuestamente, a su expareja sentimental en Málaga. Según las indagaciones, el investigado en el ámbito de la violencia de género acechaba insistentemente a la víctima hasta el caso de permanecer horas sentado en un banco con la vista puesta en su ventana o, incluso, hacerse pasar por su hermano en la recepción de su centro de trabajo para preguntar por ella.

Los hechos se iniciaron cuando una mujer decidió romper la relación sentimental que mantenía con su compañero, «una situación que le llevó a sufrir episodios de acoso u hostigamiento desde el pasado mes de junio», informaron ayer desde la Comisaría provincial. La situación se agravó tanto que la víctima interpuso denuncia el 16 de septiembre. A pesar de las múltiples negativas de la perjudicada a retomar la relación, el investigado intentó recuperarla. Primero, indicaron, supuestamente la acosó mediante mensajería instantánea, que llevaron a la víctima a bloquear su contacto. Más tarde, con llamadas a su teléfono fijo, en las que solo le escuchaba respirar. Al observar que por los medios expuestos no conseguía que volviera con él, el investigado habría pasado a seguir de cerca los pasos de ella. Según las pesquisas, el hombre comenzó a frecuentar a diario el barrio de su expareja, de forma que se le vio «en numerosas ocasiones rondar su domicilio en bici o incluso permanecer sentado durante horas en un banco con la vista fija en su ventana». En una ocasión, el arrestado llegó a abordar a su expareja pidiéndole que volviera con él y, ante su negativa, comenzó a insultarla. En otra ocasión se dirigió al lugar de trabajo de la que fuera su novia, haciéndose pasar por su hermano, para saber de ella y conocer sus movimientos. Una vez arrestado y puesto a disposición judicial, el juez decretó una orden de alejamiento de 500 metros e incomunicación con la víctima.