La empresa Coca-Cola European Partners (CCEP) ha anunciado este jueves a sus trabajadores de la planta embotelladora de Málaga, inaugurada hace seis décadas, que va a presentar un expediente de regulación de empleo (ERE) que supondrá el cierre de las emblemáticas instalaciones. La decisión afecta a los 77 trabajadores fijos de la plantilla, según ha explicado a este periódico el secretario general del sindicato CCOO en Málaga, Fernando Cubillo.

La fábrica de Coca-Cola, situada en las cercanías del aeropuerto de Málaga, junto a la zona de San Julián, se engloba en la sociedad Rendelsur y se encarga del envasado de producción para el sector de la hostelería.

Cubillo ha explicado que las negociaciones en torno al ERE comenzarán la próxima semana y ha señalado que la posición del sindicato, que ostenta la presidencia del comité de empresa, es en primer lugar luchar por el mantenimiento de los puestos de trabajo. Al parecer, la intención de Coca-Cola es ofrecer a parte de la plantilla la recolocación en la planta de Sevilla, situada en La Rinconada. Un tercio de la plantilla tiene más de 55 años.

"Los trabajadores lo han dado todo estos años, también durante las crisis, y han hecho todo lo que se les ha pedido. Y ahora llega esta decisión", ha afirmado Cubillo, que lamenta una nueva pérdida de tejido industrial en Málaga.

El responsable de CCOO ha recordado que las instalaciones de Coca-Cola en Málaga han funcionado en los últimos años a pleno rendimiento, como prueba el hecho de siempre se contrataba a unos cien trabajadores eventuales como refuerzo a partir del mes de marzo para cubrir toda la temporada alta. Este año, con la incidencia de la pandemia, esas incorporaciones no se han producido.

La planta fue inaugurada el 7 de noviembre de 1960, por lo que está próxima a cumplir su 60 aniversario. Cubillo ha insistido en que el comité de empresa negociará para alcanzar "el mejor acuerdo" y ha reclamado a Coca-Cola un plan de recolocaciones.

Por su parte, la compañía ha resaltado en un comunicado que esta decisión supone concentrar la producción de Andalucía en una única planta, la de Sevilla, para asegurar la competitividad y aprovechar las economías de escala.

Así, han indicado que la intención es iniciar un proceso de consulta con los representantes de los empleados de la planta de Málaga (Rendelsur) en cuanto se constituya la mesa de negociación, a partir de la semana que viene.

"Estamos confiados en que llegaremos a un acuerdo en el periodo que marca el proceso de negociación", han asegurado desde Coca-Cola. "Una vez terminado el proceso de consulta, mejorará nuestra posición competitiva, lo que nos permitirá seguir siendo una empresa relevante en Andalucía, tanto en generación de empleo y de valor económico como de liderazgo a nivel industrial", han añadido.

"El compromiso de CCEP es buscar todas las opciones posibles para mantener el nivel de empleo en Andalucía y asegurar que mantenemos nuestra capacidad industrial en esta comunidad autónoma, en un centro puntero como es el de La Rinconada (Sevilla), que es la planta más grande de CCEP en toda Europa", ha subrayado la compañía, cuya plantilla se eleva a 4.300 trabajadores en España.

En este sentido, la firma ha explicado que la planta de Sevilla cuenta con capacidad para producir el 25% del total del volumen vendido en el mercado español a través de sus 11 líneas, que sirven la totalidad del porfolio, y cuenta, además, con un almacén robotizado de última generación con capacidad para 100.000 pallets.

Además, esta planta cuenta, según CCEP, con posibilidades de crecimiento futuro para dar servicio a la demanda que pueda producirse. En 2019 la producción de Sevilla alcanzó los 130 millones de cajas unidad. La planta de Málaga, en el mismo periodo, produjo 20 millones de cajas en dos únicas líneas (vidrio retornable y BIB).

"En el entorno actual tenemos que asegurar que contamos con fábricas innovadoras tecnológicamente, más grandes, que sean capaces de producir todo el porfolio de productos, tengan mayor flexibilidad y aprovechen las economías de escala", han manifestado desde la compañía.

El anuncio del cierre ha motivado incluso una controversia política en las redes sociales. El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga, Daniel Pérez, ha afirmado en su cuenta de Twitter que la pérdida de la planta de Coca-Cola es "una pésima noticia" para la ciudad" y ha sostenido que "siempre se trabajó para su mantenimiento, incluso en los peores tiempos". Pérez ha apelado al presidente de la Junta, Juanma Moreno, y al alcalde, Francisco de la Torre, a "ponerse las pilas" para evitar el cierre y mantener los empleos.

El regidor, por su parte, le ha respondido en la misma red con otro mensaje en el que ha escrito: "Hagamos memoria", afirmando que en 2003/04 el Ayuntamiento de Málaga planteó una modificación elementos en Campanillas para la nueva fábrica de Rendelsur.

"La entonces consejera de Fomento, Concha Gutiérrez, veta modificación. El PSOE impidió que Coca Cola tuviera nueva fábrica en Málaga. Esa gran fábrica no cerraría hoy FTP", ha agregado.