El Ayuntamiento de Málaga está tramitando una modificación de calado del Reglamento de Participación Ciudadana de 2006, uno de los textos normativos de los que más ha presumido el Consistorio. De cualquier forma, este cambio servirá para introducir una dimensión que no se había tenido en cuenta hasta ahora: las nuevas tecnologías como herramientas de participación vecinal, de forma que los ciudadanos de a pie, de forma individual y no sólo a través de las asociaciones que los representarían o dicen representarlos, puedan intervenir en las mesas, comisiones o grupos de trabajo o consejos existentes en el Consistorio malagueño. Ello se haría a través de herramientas como 'Zoom' o 'Meet'.

Explica la edil del área, Ruth Sarabia, que en julio se presentó el Plan de Innovación Social y uno de los retos previstos en ese documento era, precisamente, la mejora de la participación ciudadana. En julio, dice, los ciudadanos pudieron votar de forma online y, presencialmente, en los distritos, el pasado mes de septiembre, y lo que se votó «es cómo mejorar la participación ciudadana, cómo integrar a la gente que no suele participar. Pues salió que el Ayuntamiento debía estar en redes, cosa que ya ocurre y que la presencia no había de ser meramente informativa, sino también tener canales específicos para que los ciudadanos pudieran participar». Dice Sarabia que quienes más participan son los mayores de 65 años, habitualmente miembros de asociaciones vecinales o de otro tipo que acuden a las mesas de trabajo, consejos sectoriales, comisiones o grupos del Ayuntamiento. Sin embargo, con menos de 45 años se da una escasa por no decir testimonial participación del malagueño en estos órganos, siempre según Sarabia. Así, las votaciones 'online', puestas en marcha junto a Arrabal, suscitaron la atención y el voto de 650 personas. Y luego se hizo de forma presencial en los distritos. La mayoría, explica la concejala, pidió una reforma del Reglamento de Participación Ciudadana. «En los distritos fuimos a los centros de salud, los mercadillos, montamos mesas», declara.

El anterior reglamento no recogía la posibilidad de que se pudiera participar en estos órganos (102 en total) de forma online, de tal manera que la crisis del coronavirus, precisamente, ha evidenciado la necesidad de que ello pueda ser así: se han celebrado en el Consistorio ruedas de prensa, mesas de contratación, plenos y comisiones de forma digital. ¿Por qué no podría hacerse con los consejos ciudadanos sectoriales o de distrito? La modificación del reglamento se ha consensuado, defiende Sarabia, ya con los ciudadanos de a pie y de aquí a final de año se va a hacer lo propio con las asociaciones del municipio.

«La reforma va en la línea de que podamos incluir con plenas garantías, por ejemplo, que se pueda usar Zoom en órganos de participación, en los consejos sectoriales, en las mesas de trabajo. Se puede opinar presencialmente, pero allí suelen ir siempre los mismos. Participan los más mayores, queremos rejuvenecer la participación ciudadana cambiando ese reglamento e introduciendo las nuevas tecnologías», indica la también edil del distrito de Campanillas y responsable de Cooperación Internacional del Consistorio.

Importancia de los foros

Pone Sarabia el ejemplo de la importancia de algunos de esos foros, como las mesas de trabajo o las comisiones en el que se decide cambiar la movilidad en un barrio o la ejecución de un parque. Y muchas de esas decisiones se toman siempre en esos foros, muchos de los cuales se celebran a media mañana de días laborales, lo que impide que los ciudadanos de a pie, y de otros tramos de edad, que también se van a ver afectados por ello, no puedan acudir a esos foros.

«Hay muchos órganos entre comisiones, consejos, un total de 102, tenga en cuenta que los once distritos tienen cuatro mesas de trabajo, el consejo territorial el político, el consejo sectorial del mayor, por ejemplo, tiene varias comisiones de trabajo, el de la mujer, cinco». Concluye Sarabia recordando que Málaga tiene 3.600 asociaciones inscritas y funcionando aquí, sólo superada por Barcelona con 6.000. «Quienes participan en asociaciones habitualmente suelen tener más de 55 años. Tenemos que rejuvenecer la participación ciudadana». La reforma estará lista a final de año.