Un exdirector de Isofotón, que consiguió ayudas de la Junta de Andalucía que están siendo investigadas, ha declarado a la jueza encargada del caso que la situación y las expectativas de crecimiento de la empresa justificaban el dinero público recibido y que la culpa de su hundimiento fue de China.

El Juzgado de Instrucción número 3 de Sevilla comenzó ayer jueves la ronda de declaraciones sobre los cerca de 38 millones de euros que la Administración andaluza concedió a la sociedad malagueña en tres avales de la agencia Idea y un préstamo de su filial Soprea entre 2010 y 2012, unos hechos que pueden ser constitutivos de los delitos de malversación, prevaricación y falsedad documental, según la jueza.

Entre los investigados figuran cuatro exconsejeros y varios ex altos cargos del Gobierno andaluz, así como los principales dirigentes de Isofotón, los hermanos Ángel Luis y Diego Serrano, que estaban citados este 15 de octubre pero no comparecieron, según informaron a Efe fuentes judiciales.

Quien sí lo hizo fue Óscar López, antiguo director financiero de producción de Isofotón, quien relató que su papel en las negociaciones con la Junta era el de «un simple secretario» que tramitaba los documentos, si bien recalcóque la mercantil facturaba mucho dinero entre 2010 y principios de 2011 y «no había ningún motivo para pensar que iba a desaparecer».

Esa «expectativa de crecimiento» de una empresa entonces líder nacional en su sector, el de las energías renovables, con cifras de ventas notables en mercados como el italiano o el alemán, justificaba la apuesta del Gobierno andaluz por ella, añadió el investigado.

El problema, dijo, es que China comenzó a hacer dumping a finales de 2011 y vendió por debajo de los costes de producción, lo cual provocó un gran perjuicio al sector en general y a Isofotón en particular.

Hasta entonces, dijo, la empresa era «viable y de plena confianza» y así seguía cuando Idea le concedió los primeros avales, que además se destinaron a los fines previstos, como comprar materia prima.

En cuanto a los hermanos Serrano, Ángel Luis alegó como motivo de su incomparecencia que estaba en viaje de negocios de Panamá, donde reside, a México DF, como ya le comunicó a la jueza después de que esta lo citase como investigado en un auto de 24 de julio.

La instructora rechazó el motivo en una providencia de 21 de septiembre y el investigado presentó un recurso de reforma que aún no ha sido resuelto, por lo que ayer miércoles, la víspera de su comparecencia, mandó otro escrito al juzgado en el que reiteraba que sólo estará disponible para declarar después del 1 de noviembre.

En el escrito, al que ha tenido acceso Efe, Serrano insiste en su «voluntad de comparecer», pero también se adhiere a los recursos presentados por otros investigados que piden la nulidad de las prórrogas de la instrucción judicial y la «expulsión» de todas las diligencias practicadas después del 6 de junio de 2017.