La Diputación de Málaga ha sacado a licitación por 566.399,55 euros la rehabilitación parcial de su antigua sede en la plaza de la Marina. El proyecto contempla la actuación sobre las fachadas, que son las partes más deterioradas del edificio, y sobre sus tres vestíbulos principales en el interior. Asimismo, incluirá la sustitución de la instalación de iluminación artística del exterior y la de iluminación interior de los mencionados vestíbulos. El plazo de presentación de ofertas se encuentra abierto hasta el 3 de noviembre.

El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha destacado la importancia de esta actuación, ya que permitirá mejorar el estado de conservación de un edificio emblemático de la capital, que data de 1954, que además tiene una gran relevancia y presencia por su ubicación, justo entre el centro histórico y el puerto, en una de las zonas más transitadas de Málaga.

"En el proyecto hemos tenido en cuenta la ubicación y la singularidad del inmueble y el grado de protección arquitectónica con el que cuenta. Y con la iluminación artística que instalaremos ganará en prestancia la imagen nocturna de la línea de fachada de la plaza de la Marina", ha añadido.

Igualmente, Salado ha incidido en que se trata de un proyecto que, por el volumen de la inversión, también contribuirá a la creación de puestos de trabajo, "algo especialmente importante en estos momentos de grave crisis que vivimos".

Al tiempo, ha resaltado el compromiso de la Diputación para rehabilitar y mejorar la conservación de los inmuebles de su propiedad, como ya se ha hecho con la plaza de toros de La Malagueta y como se hará también en el Palacio de Valdeflores, en la calle Carretería.

Durante un plazo de cuatro meses, se llevarán a cabo actuaciones puntuales en una superficie de 569,53 metros cuadrados sobre los 5.544,84 metros cuadrados totales del edificio, según el proyecto redactado por los arquitectos Ángel Pérez Mora y Borja Peñalosa Bejarano, del servicio de Arquitectura y Urbanismo de la Diputación.

Los trabajos afectarán solo a algunas zonas de la fachada para mejorar su conservación, así como a acabados e instalaciones de iluminación, saneamiento, fontanería y ventilación de algunas estancias. No se modifican en ningún caso los elementos estructurales del inmueble, ni sus parámetros urbanísticos ni la configuración de sus fachadas.

La intervención se centrará en la rehabilitación de los aplacados (revestimientos) de las plantas baja y primera de las fachadas, que son los más deteriorados, quedando el resto de superficies en su estado actual. Se actuará tanto en los exteriores del edificio que dan a la plaza de la Marina como en los que dan a las calles Molina Lario, Ancla y Sancha de Lara.

En este sentido, se procederá a la limpieza con chorros de arena de elementos exteriores, como sillares arquitectónicos moldurados, jambas, alfeizares, dinteles y cornisas; así como al saneado de juntas y a la eliminación de morteros de cemento, reponiendo los sillares con piedra de calidad, textura y coloración similar a la fábrica original. Y se pintará el casetón de cubierta actualmente de color blanco con pintura pétrea en color crema similar en el resto de partes enfoscadas de la fachada.

También se instalarán en algunas zonas un sistema de cables tensados y una malla de nailon para evitar que se posen las palomas en poyetes y cornisas.

El proyecto de rehabilitación también incluye la sustitución de la iluminación artística del inmueble, actualmente sin servicio y obsoleta. En este sentido, se instalarán diferentes proyectores en las fachadas con un sistema LED RGB, con control de iluminación para encendido y apagado, que permite el uso de diferentes colores, para la celebración de días especiales, y tonos de luz para resaltar elementos del edificio.

En cuanto a las actuaciones en el interior, se actuará sobre los revestimientos con piezas de piedra de las paredes que delimitan los vestíbulos en las plantas baja, primera y segunda, que en algunos casos se encuentran gravemente deteriorados. En los mismos vestíbulos se sustituirá la iluminación interior, que es escasa y obsoleta, por otra de tipo LED (tanto de alumbrado normal como de emergencia) y se renovarán los falsos techos.

Además, en la planta segunda se reorganizarán los aseos existentes junto al salón de actos y se renovarán sus acabados, especialmente el de las paredes que presentan signos de deterioro (desprendimiento y abombamiento). Esta actuación lleva aparejada la sustitución de la instalación de iluminación y de ventilación.