Los salones de belleza, estética, peluquería y barbería han vuelto a reclamar al Gobierno la bajada del IVA del 21% al 10%, bajada del IVA del 21% al 10% el tramo reducido. Los negocios recuerdan que su actividad se calificó como esencial durante los peores meses de la pandemia y ahora piden ayuda para evitar el cierre antes de que finalice el año.

Iniciada la fase 0, a principios de mayo, los salones tuvieron que afrontar una primera inversión destinada a la adaptación del local para cumplir con los protocolos de seguridad antiCovid-19, esto es, instalar pantallas protectoras, adquirir equipos de protección individual, productos desinfectantes... todo ello supuso un 30% de gasto extra para los negocios, según la Asociación de Peluquería y Belleza Malagueña, que aglutina a cerca de un centenar de negocios en la provincia.

Y pese al auge de clientela inicial tras los meses de confinamiento, lo cierto es que este sector ha perdido sus principales incentivos económicos durante la primavera y el verano, celebraciones como bodas, bautizos y comuniones que se han pospuesto para el próximo año, y ahora se enfrentan a un invierno con una navidad a medio gas, sin cenas ni comidas de empresa.

"A nivel económico estamos muertos, directamente. Estamos notando un 50% menos de clientela en los salones", ha alertado la portavoz de la Asociación de Peluquería y Belleza Malagueña, Mayca Campoy, en una concentración organizada en la plaza de la Constitución para pedir la reducción del IVA para este sector, incluido en el tramo general desde 2012, cuando se aplicó una subida del 8% al 21%.

Según Campoy, prácticamente el 100% de los locales, con una media de tres empleados, mantiene a parte de la plantilla en ERTE y la mitad de los salones tienen "problemas para llegar a fin de mes".

A nivel nacional, el gremio abarca unos 48.000 centros y cuenta con unas expectativas desoladoras para finales de año: el 60% de los negocios tendrá que cerrar si la situación no mejora.

Ocho años después del incremento impositivo y con una pandemia de por medio, el sector alza la voz: "El 21% de IVA cierra nuestros negocios", "Sobrevivimos por los pelos" o "Somos esenciales". Además sostienen que cumplen con todas las medidas de seguridad, han invertido en ello, de manera que su sector es de los "más esperanzadores" en cuanto a datos de contagio, ya que apenas reportan casos.