El Hospital Regional Universitario de Málaga ha apostado por la figura de Enfermería de Práctica Avanzada para la atención de personas con heridas crónicas complejas, una figura cuyo último objetivo es asegurar una atención integral, individualizada y de calidad que dé respuesta a las necesidades específicas de estas personas.

Esta figura, que comenzó a funcionar en 2018, se ha reanudado para continuar potenciando la excelencia en los cuidados, dentro de un abordaje multidisciplinar y basado en la mejor evidencia científica disponible, de cara a la recuperación total del paciente.

La complejidad de muchos de los procesos asistenciales que se atienden en un hospital de tercer nivel, como el Hospital Regional Universitario de Málaga, ha ido en aumento de forma progresiva en los últimos años. En el marco del desarrollo de nuevas competencias profesionales, el sistema sanitario público andaluz ha definido perfiles específicos de Enfermeras de Práctica Avanzada (EPA).

Las Enfermeras de Práctica Avanzada son profesionales capaces de prestar una atención sanitaria sustentada en resultados de investigación, valorando la epidemiología clínica y los estándares internacionales de calidad, garantizando la utilización correcta de los recursos y así contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario. En su práctica integran cuatro roles: clínico experto, consultor, docente e investigador.

La enfermera de Práctica Avanzada Begoña Martín ha asegurado que su papel es el de coordinar el proceso asistencial en relación con la herida para asegurar unos cuidados de calidad y eficaces. Atiende tanto a pacientes ingresados en las unidades de hospitalización como de forma ambulatoria, en consulta de enfermería. Actúa principalmente como enfermera consultora de otros profesionales sanitarios ante heridas extremadamente difíciles o con mala evolución.