Guillermo Jiménez Smerdou, Premio Reconocimiento de La Opinión de Málaga 2020, es un ejemplo de longevidad profesional digna de ser destacada. Este periodista malagueño, este contador de historias y buscador de noticias -como él se define- sigue mostrando a los lectores de La Opinión de Málaga, apuntes, retazos de una Málaga pretérita que necesita ser contada a las nuevas generaciones para no caer en el olvido. Sus «Memorias de Málaga» de los fines de semana en La Opinión, son un ejercicio periodístico sin paliativos, una manera de entender un oficio muchas veces unido inexorablemente al destino de una ciudad.

Y es que este buscador de noticias, Premio Ondas por su contribución a la Radio, una radio, en esencia Radio Nacional, empezó como colaborador cargado de críticas cinematográficas en un bloc cuando tenía veinte años.

El cine, su otra pasión, le llevó a liderar un programa en la citada emisora, Cine Invisible, que repasó toda la actualidad cinematográfica durante tres décadas. Smerdou, un tipo innovador en esto de la radio, incluyó en su programa la insólita tarea de retransmitir películas para la radio. Cómo no, la iniciativa fue un éxito clamoroso ya que las retransmisiones fueron el mejor reclamo para que la gente fuera a las salas a ver las películas.

Jiménez Smerdou fue jefe de Informativos y jefe de Producción de RNE en nuestra ciudad así como redactor de periódicos como Ideal, La Vanguardia, Pueblo, Ya o el diario Madrid. También escribió artículos de viajes para medios como La Hoja del Lunes.

La vida de Guillermo Jiménez Smerdou es una vida dedicada de forma apasionada a un oficio con una clara vocación de servicio público. Guillermo encontraba las historias en la calle «la principal escuela del periodista» y las plasmaba en negro sobre blanco o a través de los micrófonos con objetividad y oficio. Un hombre, un periodista que alternaba las historias de verdad con las de la gran pantalla, que aún siguen apuntadas en el viejo bloc del maestro.