Una reunión entre miembros de la Gerencia Municipal de Urbanismo y vecinos del entorno de los Baños del Carmen sirvió ayer para que el Ayuntamiento enseñara a los residentes el documento inicial o diseño preliminar del parque marítimo-terrestre que acogerá el balneario y que ha sido elaborado por la UTE Narval Ingeniería SA-Juan Gavilanes-Francisco González, que se hizo con el contrato de adjudicación por un importe de 75.540,30 euros en enero del presente año. Estos técnicos han actualizado el anterior diseño, que ahora será más barato, previo al proyecto básico y al posterior de ejecución, y que tendrán que enriquecer con las aportaciones vecinales y de otras administraciones.

El proyecto, según explicaron varios de los presentes en las reunión, elimina la zona gris que hay junto al balneario y es un documento inicial de trabajo que debe ser consensuado. Es un acercamiento, agregaron, a lo que habrá, de forma que «se pone en valor la zona de los Baños del Carmen generando un espacio de bosque junto al mar», destacando no sólo el nuevo y enriquecido bosque, sino también una red de senderos peatonales, con materiales compactos pero blandos, resaltando sobre todos una senda que discurre paralela al mar por todo el espacio. Al ser un diseño aproximado, aún no hay memoria económica, indicaron.

Existe un acceso desde la calle Bolivia, desde donde llegará un carril bici y se ampliará la acera. Se mantiene la portada original e histórica, las taquillas y la parte de muro con arco, de forma que el resto se elimina, dando así la sensación de apertura a la ciudadanía, constituyendo una invitación a entrar a este bosque marítimo-terrestre. Se comprenden actuaciones necesarias para mantener el actual edificio del restaurante, se eliminan todas las construcciones añadidas en los años posteriores a la concepción original de este enclave urbano y el futuro bosque, además de eucaliptos -más de los existentes actualmente- y palmeras, tendrá otras especies que determine Parques y Jardines en su informe técnico y paisajístico: habrá plantas y especies arbóreas que aguanten bien la cercanía al mar.

La cota de la calle Bolivia a los Baños se salva con rampas y se da, insistieron algunos de los consultados, sensación de apertura y se establece un diálogo con el viandante que lo invita a pasar. El parque, de cualquier forma, sigue acotado por ese muro histórico, que queda disminuido, claro. La diferencia de cota, indican, de más de dos metros se salva con rampas o bajadas peatonales rellenas de tierra. Lo más destacable es un itinerario peatonal, que no paseo marítimo, que discurre paralelo al mar y al bosque, además de una red de itinerarios interiores con un parque infantil que será construido con materiales como madera y otros similares. «Hay muchos itinerarios», explican. Es un espacio naturalizado y, por tanto, «lo que se use en esta zona sólo se disfrutará en los Baños del Carmen».

Insistieron algunos de los consultados en que se incrementa el número de eucaliptos y que habrá palmeras, zonas de estancia para familias y amigos y que son varias las rampas de acceso peatonal, mimetizadas con el entorno, desde Bolivia, en diferentes zonas, una desde esa calle y otras repartidas en distintos puntos más al oeste, y una destacada junto a la caseta de las taquillas, que mete al peatón directamente en el bosque. Son, indican, pasillos amplios en bajada. Insistieron otras fuentes consultadas por este periódico en el hecho de que este es «el primer round», el bosquejo inicial de lo que será el parque marítimo-terrestre, un diseño que habrá de ser enriquecido con las aportaciones de otras administraciones. Este proyecto, por cierto, lleva muchos años de retraso y corrige al anterior en bastantes puntos, aunque parece que, por fin, arranca de verdad la renovación del enclave. La única duda consiste en saber qué va a pasar con el astillero allí ubicado, una cuestión que habrá de ser resuelta a lo largo de los próximos meses.

Pero no es lo único que hay que hacer en el balneario. Por otro lado, Costas tiene que ejecutar, salvo que haya nuevos cambios (es otro proyecto), obras en la playa de Poniente, colocando un espigón junto al espacio que ocupaba el tranvía y otro más pequeño junto al balneario o, tal vez, uno en lugar de un par, así como también hará un aporte de arena de 80.000 metros cúbicos (esto es lo que había previsto en una actuación anexa al parque marítimo-terrestre, que sufragará el Gobierno y que el Ayuntamiento se ha comprometido también a financiar en la parte que se acuerde). En verano de 2018, se tramitaba por el procedimiento ordinario el documento ambiental y el proyecto, que debía redactar la Universidad de Cádiz (actuación marítima). Estaba previsto que, una vez pasada la época estival de ese ejercicio, saliera a información pública la actuación litoral para que se aportaran esas alegaciones y, en bases a las mismas y a lo que determine el estudio ambiental, así como al deseo de la ciudad, se ejecutaría esta iniciativa tal y como estaba, con alteraciones importantes o pequeñas mejoras, señaló entonces la Subdelegación del Gobierno. Luego, deberá ir a la Dirección General de la Calidad Ambiental. De todo esto, por ahora, no ha habido nuevas noticias. La concesión, por su parte, tenía previsto inyectar 800.000 euros para rehabilitar el edificio.