Aunque Alicia Talavera confiesa que no se centró en su licenciatura de Biología «hasta tercero o cuarto», luego vino el doctorado con sobresaliente cum laude y hace unos días, el Premio Málaga de Investigación 2020, en la categoría de Ciencias.

El prestigioso y veterano premio, que convoca la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo y la Academia Malagueña de Ciencias, con el patrocinio de la Fundación Málaga, ha recaído en esta bióloga de Torre del Mar de 30 años, por su trabajo 'Caracterización genómica del aguacate (Persea americana Mill.)', que tiene detrás más de cuatro años de esfuerzo.

Alicia Talavera cuenta que el trabajo, que es una parte de su tesis doctoral, más amplia, estudia la diversidad genética de los aguacates, con vistas a que algunas de las características de esta fruta de origen americano «se puedan mejorar, adaptándose a las necesidades del mercado o a los retos del futuro como el cambio climático».

Entre esas mejoras, por ejemplo, podría estar el obtener un aguacate con un tamaño de hueso menor, resistente a una plaga determinada o que la fruta tuviera mayor tamaño. De cualquier modo, apunta la bióloga, todos esos logros serían el objetivo final, pues el trabajo lo que aporta es «una base de conocimiento en la que hay trabajar bastante».

En todo caso, lo investigado por la joven bióloga sobre el ADN de las distintas variedades del aguacate ha sido calificado por el jurado como de «gran nivel científico» aparte de suponer «una esperanza para este importantísimo sector agrícola en nuestra provincia».

Además, el jurado ha destacado el que busque «reducir la cantidad de agua necesaria para el cultivo».

A este respecto, explica que «la información que hemos generado esperamos que se utilice para identificar regiones del genoma relacionadas con rasgos importantes como la adaptación a la sequía, la sal, etc...».

La Mayora

Alicia Talavera ha podido desarrollar este trabajo premiado gracias a la beca de investigación que obtuvo para trabajar en el Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea (IHSM) 'La Mayora', en Algarrobo, un centro dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y la Universidad de Málaga.

Por este motivo, quiere resaltar que aunque el premio sea individual, «hay mucho trabajo detrás, ya que están desde los técnicos del campo, de laboratorio, los compañeros, los jefes que ayudan muchísimo y te dan muchas ideas... por eso quería dar las gracias al centro, porque es un lujo trabajar en él». También aprovecha para subrayar el esfuerzo de realizar una tesis y la importancia de las colaboraciones entre grupos e investigadores.

En el horizonte inmediato tiene ahora una contratación como investigadora postdoctoral en un proyecto en la Universidad de Pisa, «para estudiar la genética de la higuera y buscar las variedades que resistan mejor el cambio climático».

La joven bióloga dice sentirse afortunada, porque reconoce que es bastante complicado investigar en España. «De hecho tengo muchos compañeros en mi misma situación que han terminado el doctorado y no encuentran trabajo, así que tienes que irte fuera. Hay gente muy buena y pocas plazas», resalta.

El premio, confiesa, le ha hecho «muchísima ilusión» y aunque reconoce que le queda mucho por aprender, sí tiene claro que centrará su prometedora carrera que el área de conocimiento en el que tanto lleva investigando.