La Junta de Andalucía remitió a la Gerencia Municipal de Urbanismo un escrito hace dos semanas en el que da permiso para la ejecución de un parque metropolitano en los terrenos del antiguo Campamento Benítez, desbloqueando así la actuación, aunque le pide al Consistorio malagueño que explique la serie de obras propuestas para reducir los efectos de potenciales inundaciones que pudieran darse en esta zona verde. Ello supone, de facto, el desbloqueo de esta gran infraestructuras, aunque hay condiciones.

El plan especial del Campamento Benítez, pactado entre el Consistorio malagueño y la Junta del PSOE, establecía, según explica el edil de Ordenación del Territorio, Raúl López, que antes de ejecutar el parque metropolitano, había que desdoblar el arroyo del Cañuelo. En este sentido, la actuación hídrica supone una inversión superior a los seis millones de euros, mientras que el parque cuesta 4,7 millones de euros. Para evitar ese altísimo coste, el Consistorio propuso realizar una serie de actuaciones blandas con el fin de reducir los potenciales efectos devastadores de una inundación, de forma que pudiera construir el parque y estas medidas correctoras, pero la posición autonómica, en principio, ha sido siempre la misma: hay que hacer primero la actuación en el arroyo y luego podrá ejecutarse el parque. La misma, claro, hasta ahora, porque hace dos semanas el Ejecutivo andaluz remitió una carta al departamento que dirige Raúl López en el que le dice, básicamente, que puede ejecutar el parque metropolitano antes de desdoblar el arroyo, con lo que la actuación queda desbloqueada, pero, al mismo tiempo, le pide que le explique en qué consisten esas medidas blandas (absorbedores o desvíos de corrientes de agua, entre otras).

«Nos piden que las expliquemos, que las fundamentemos, que les demos cuerpo, así que estamos preparando un contrato menor, que se adjudicará a un especialista en inundabilidad, que nos haga un anexo, que nos complemente el parque con un proyecto para enviarlo a la Junta, de forma que se incorporará al proyecto principal de parque y así la Junta nos dé el visto bueno, de forma que esas medidas para reducir la inundabilidad vayan anexadas a la actuación principal», dice López, quien insiste en que no hay que reformar el plan diseñado inicialmente.

«Estas actuaciones complementarían al proyecto ya redactado y nos permitiría licitar, tal vez, el proyecto del parque marítimo en el primer trimestre de 2021 y empezar las obras, quizás, a finales de año», dice.

El interés municipal por retrasar el desdoblamiento del arroyo del Cañuelo no sólo se fundamenta en su alto coste económico, sino también en que los efectos de una inundación no serán los mismos en una zona verde que, por ejemplo, en un suelo habitado, y la idea del Ayuntamiento es ejecutar cuanto antes ese parque metropolitano.

Primero, el parque

El escrito autonómico es, para el edil, una buena noticia, porque «certifica que no es necesario modificar el plan especial, se puede hacer primero la actuación en el parque y después desdoblar el arroyo. En el plan especial del Benítez, así se negoció con la Junta del PSOE, constaba que se haría primero el desdoblamiento del Cañuelo y luego la ejecución del parque. Cabe recordar que el parque lo logró el alcalde de la ministra Ana Pastor, y antes el PSOE lo quería dar a cambio de millones de euros».

El Ayuntamiento, por tanto, planteó a la Junta socialista que se pudiera invertir el orden. «Le dijimos que nos dejaran invertir el orden, para hacer el parque a la vez o antes del desdoblamiento del arroyo. Era una situación anómala». Entonces, Urbanismo introdujo su propuesta de realizar una serie de actuaciones para reducir los efectos de las inundaciones cuya aclaración o explicación más extensa ha solicitado la Administración andaluza.