Salvador González Martín tomó posesión ayer como decano del Colegio de Abogados de Málaga en un acto celebrado en el Palacio de Ferias y Congresos (Fycma) y que ha estado presidido por la presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega.

En su intervención, el decano aseguró que la corporación colegial va a recuperar el diálogo con los otros operadores jurídicos, con los que trabajarán «codo con codo» para reconducir y solventar las dificultades existentes, siempre con el objetivo de mejorar la Justicia y los servicios que se prestan a los ciudadanos. «Necesitamos que se produzca una interacción fructífera entre todos para lograr los objetivos que nos hemos marcado», afirmó, al tiempo que apuntó que todos los operadores son parte esencial de la Justicia, elemento troncal e imprescindible para una convivencia pacífica y una sociedad próspera.

Salvador González, quien ha relevado en el cargo a Francisco Javier Lara, reivindicó la función de los letrados en el marco del Estado de Derecho y la necesidad de que la abogacía malagueña se haga oír, genere opinión y contribuya a mejorar la Justicia y las leyes. «Somos un elemento indispensable para la convivencia ciudadana, un actor fundamental en el mundo político, en el mundo económico y en el mundo social; y un verdadero generador de riqueza y empleo».

El decano agradeció el importante respaldo obtenido en las elecciones celebradas el pasado 28 de octubre y explicó que la propuesta de su equipo se fraguó durante el estado de alarma y el confinamiento, periodo en el que se puso de manifiesto la necesidad de modernizar la Administración de Justicia y de dotarla de los medios adecuados. A este respecto, apuntó que es necesario reclamar una decidida inversión en Justicia, en medios tecnológicos, organizativos y económicos, de manera que se permita elevar las retribuciones de los profesionales que intervienen en ella, especialmente los abogados y procuradores del Turno de Oficio.