El cribado masivo con el que la Consejería de Salud de la Junta testea a las localidades andaluzas con mayor incidencia del virus ya se ha realizado en once municipios malagueños, sobre los que se dispone de la información extra que esta herramienta proporcionó en su momento. En la geografía malagueña, esta prueba colectiva se ha realizado durante el último mes y medio en Villanueva de la Concepción, Sierra de Yeguas, Almáchar, Teba, Cuevas de San Marcos, El Borge, Periana, Arriate, Ronda, Campillos y Villanueva del Trabuco.El número de testeos practicados no son aún demasiados si se tiene en cuenta, por ejemplo, que en Sevilla ascienden casi a una treintena las localidades en las que se ha autorizado, que además vienen a representar más de una cuarta parte de los términos municipales de esa provincia. En la de Málaga, en cambio, las autoridades sanitarias solo han considerado, de momento, que era necesario desarrollar esta medida en poco más del 10% de sus 103 municipios.

Entre estas once localidades, la única que puede considerarse por su población una de las principales ciudades malagueñas es Ronda. Esto motivó que el testeo se alargase la semana pasada durante dos días, empleando seis horas y media de franja horaria durante las tardes, cuando en otros pueblos la realización de las pruebas se ha resuelto en una sola mañana. De hecho, en la Ciudad del Tajo se pretendía practicar el triple o el cuatriple de test que en otros municipios, pues llegaron a ser convocadas en sendos escenarios unas 1.100 personas. Sin embargo, se ausentaron casi la mitad -un 41%- de los usuarios citados y solo comparecieron para el cribado masivo 652 personas.

En el otro extremo de la provincia, en Cuevas de San Marcos, se dio el primer caso en el que un alcalde presionó abiertamente para que la Consejería de Salud realizase entre sus vecinos el cribado masivo. Es más, a pesar de tratarse de un regidor con las mismas siglas que el presidente del Gobierno andaluz, José María Molina (PP) llegó a decir que le contrataría el testeo a una empresa privada, si no había una reacción oficial al respecto, porque la situación sanitaria allí era «insostenible». Luego, cuando la Junta accedió a practicar la prueba se dio la particularidad de que uno de los dos contagios que afloraron era el del propio José María Molina, quien compatibiliza su faceta como gobernante con su trabajo en la farmacia de este pueblo situado en la comarca nororiental de Málaga.

Cuevas de San Marcos ronda los 3.600 habitantes y el suyo es actualmente -como en su momento lo fue Guaro- el caso del municipio pequeño de esta provincia que, tras el brote en la residencia de mayores, ha sido azotado de forma más dramática por la pandemia, pues se han superado los 230 casos confirmados y la quincena de fallecimientos en su término municipal.

Hasta el momento, el último alcalde malagueño que ha tenido que ejercer como principal anfitrión durante la realización de los testeos ha sido el de Villanueva del Trabuco, José María García Campos (Trabuco Sí). Cuando le solicitó el cribado masivo a la Consejería de Salud justo una semana antes de que el pasado jueves se realizara, el regidor ya expresó que «es necesario saber la situación real de los municipios, sobre todo por controlar a los posibles asintomáticos que pueda haber y hacer rastreos a esos positivos que salgan». «Creemos que la tasa es alta y cualquier medida que pueda ayudar a contener nuevos contagios buena es», expuso al formular una solicitud de la prueba que fue atendida y aprobada por Salud -a diferencia de lo que ha sucedido con otras localidades- de forma inmediata.

No ha sido el caso de lo sucedido en Cuevas del Becerro, que lo solicitó justo un día antes que Villanueva del Trabuco. Tras serle denegado en esa primera instancia, tanto todos sus concejales como numerosos vecinos han llegado a implicarse en movilizaciones para la aprobación del cribado que han incluido la celebración de caceroladas. Mientras tanto, los contagios han ido creciendo en este municipio de unos 1.600 habitantes, situado en la comarca del Guadalteba y que ejerce como puerta de entrada a la Serranía de Ronda. En la actualidad, la tasa de incidencia ha superado la barrera de los 3.500 casos por cada 100.000 habitantes, lo que lo mantiene a la cabeza en esta provincia y entre los primeros puestos en toda la comunidad autónoma.

En los últimos días, también han pedido el cribado masivo al menos otras cuatro poblaciones malagueñas más: Manilva, Archidona, Cañete la Real y Montecorto. Tras el Consejo de Gobierno de esta semana, la Junta de Andalucía confirmará oficialmente en cuántas localidades malagueñas más se hará el testeo próximamente.

Almáchar baja la curva

En Almáchar también se ha producido un caso excepcional dado que es, hasta ahora, la única localidad malagueña en la que el cribado poblacional se ha tenido que llevar a cabo en dos ocasiones. Entre sendos sondeos mediaron dos semanas y en los resultados se pudo apreciar la evolución hacia una situación mejor de la pandemia, ya que mientras el primer testeo arrojó 14 positivos el segundo solo detectó un nuevo caso.

El alcalde almachareño, Antonio Yuste (PSOE), valoró en términos «muy positivos» la realización de sendas pruebas y, precisamente, puso como ejemplo de su efecto los dispares resultados cosechados en una y otra: «El segundo cribado lo conseguimos por la presión que ejercimos desde el Ayuntamiento ante la Delegación de Salud de la Junta porque los datos de incidencia del virus nos situaban, al principio, como los primeros de la provincia; presionamos lo suficiente para el segundo cribado y es verdad que la curva ya va bajando y, aunque siempre nos vamos a preocupar para que no vaya a más, estamos bastante más tranquilos afortunadamente», aseguró Antonio Yuste.

Los resultados obtenidos en las 11 poblaciones malagueñas suman un total de 117 contagios detectados. La distribución de estos guarismos contrasta entre los 65 contagios de Ronda o la veintena de casos positivos sacados a la luz en Arriate y la ausencia de nuevos infectados entre los vecinos sometidos al test de antígenos en Campillos y El Borge.

En relación a esta medida, el delegado territorial de Salud, Carlos Bautista, suele asegurar que «todos somos conscientes de que los cribados son una foto fija de un instante, de un día». «Si los ciudadanos testados una vez que comprueban, por ejemplo, que son negativos, no siguen protegiéndose y mejorando cada día todas las recomendaciones de distancia física, evitar aglomeraciones, respetar las órdenes de cierres perimetrales de municipios o las recomendaciones básicas de lavado de manos y uso de mascarillas el 100% del tiempo, este esfuerzo no habrá valido la pena para nada», sostiene Bautista.