La delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en la provincia, Patricia Navarro, ha mostrado su apoyo a las concentraciones que se están produciendo este miércoles por parte de las escuelas concertadas contra la 'Ley Celaá', considerándola "un ataque a la libertad de elección de las familias". Este apoyo "no es ir en contra de la pública", ha defendido la delegada de Educación, Mercedes García Paine.

Navarro ha manifestado su rechazo a esta ley, señalando que así el Gobierno central hace un "ataque directo" al derecho constitucional de la libre elección de los padres sobre la educación de sus hijos. Ha mostrado su apoyo "sin complejo y decidido" tanto a las protestas como a todas las familias que tienen hijos en estos centros.

La delegada del Gobierno andaluz ha advertido al Ejecutivo central de que "todavía está a tiempo" de reconsiderar esta reforma educativa que se contempla en la Lomloe, y "reconducir sus pretensiones", pues considera que son "un atentado contra la libertad".

García Paine ha añadido que no es un apoyo excluyente, pues "defendemos sin complejo tanto la enseñanza pública como la concertada". La delegada de Educación ha incidido en que el "desacuerdo" con esta ley "no quiere decir que perjudiquemos a la pública, todo lo contrario", refiriéndose a la inversión en Educación que se contempla en los presupuestos andaluces para 2021.

"A este Gobierno y a esta Consejería le importan de igual manera los alumnos de la pública, de la privada y de la concertada", ha destacado la delegada, insistiendo en que el derecho a la libre elección "no se debe vulnerar ni cuestionar".