El Colegio de Economistas de Málaga ha afirmado este viernes que el impacto de la pandemia en la actividad continúa siendo "muy preocupante" y ha advertido de que, si no se articulan medidas "efectivas" de apoyo a la liquidez de las empresas, el año 2021 traerá un gran número de quiebras de negocios en forma de nuevos concursos de acreedores.

El decano del Colegio, Juan Carlos Robles, ha señalado que la economía está ahora mismo sostenida "artificialmente" por instrumentos como los ERTE o los préstamos ICO, que ha calificado de "imprescindibles" pese a su carácter "cortoplacista", y ha apostado por articular iniciativas directas que alivien la situación financiera de las empresas para poder reestructurar sus pagos.

Los economistas calculan que el PIB de Málaga caerá este año un 12,5%, algo por encima de las bajadas previstas a nivel nacional (12,9%) y andaluz (11,7%). "Es un descalabro sin precedentes, que en la provincia se nota aún más por su dependencia del sector turístico", han comentado.

Los responsables del Colegio han explicado en la presentación de su Barómetro trimestal que la campaña navideña será mucho más floja que otros años, algo que perjudicará todavía más sectores como la hostelería o el pequeño comercio, ya muy castigados a lo largo del año. "Puede ser la puntilla para muchos negocios que centran gran parte de su facturación anual en Navidad y rebajas", ha apuntado Robles, acompañado por el director de servicios de estudios, Fernando del Alcázar, y del presidente de la comisión financiera, Antonio Pedraza.

Los economistas se han mostrado contrarios a las medidas de restricción horaria de los negocios que, a su juicio, se han revelado como ineficaces y, en cambio, reclaman un mayor control sanitario, con opciones como la realización de test de antígenos en las farmacias.

Robles ha señalado que muchas empresas está aumentando su endeudamiento durante estos meses y ha recordado que los préstamos ICO tienen que ser devueltos en el plazo correspondiente, por lo que los negocios pueden enfrentarse a situaciones límite en los próximos meses. De hecho, el Colegio cree que hay muchas empresas "zombie", en situación técnica de inviabilidad, que no han presentado todavía la solicitud de concurso de acreedores gracias a la moratoria de condiciones que aprobó el Gobierno cuando comenzó la pandemia.

Esta norma ha sido ampliada ahora hasta marzo de 2021, momento en el que, según los economistas, las presentaciones de insolvencia empresarial pueden dispararse a menos de que se adopten antes nuevas medidas de apoyo al tejido productivo. "Si no se aplican, la recesión será todavía de mayor calado", ha afirmado.

Respecto a Málaga, el Colegio ha afirmado que está sufriendo más el impacto de la pandemia por la debable que ha sufrido el sector turístico, aunque los economistas creen que, por la misma causa, será una de las zonas que antes se recuperen en cuanto la situación sanitaria mejore o se culmine el desarrollo y llegada de las primeras vacunas. "Málaga tiene una economía procíclica, con una gran capacidad de resistencia y adaptación, aunque también es por la gran cantidad de trabajadores temporales que hay", ha explicado Robles.

Como datos esperanzadores dentro de la complicada situación, los economistas han destacado la "inercia" que, pese a todo, está demostrando la actividad, el comportamiento de las exportaciones, el comportamiento del sector agroalimentario o el aumento del ahorro del sector privado (medido en volumen de depósitos bancarios), aunque este último aspecto haya sido derivado de la caída del consumo. También han destacado que ni el IPC ni los precios de la vivienda han bajado de forma sensible, señal a su entender de que el sentir general es que la crisis puede ser corta en el tiempo si las medidas sanitarias y las vacunas cumplen con las expectativas.

Pedraza, por su parte, ha afirmado que el Gobierno "no despierta confianza en el turista ni en el inversor internacional", en referencia a los Presupuestos Generales del Estado. Esta confianza, ha añadido, es clave en el caso de Málaga para atraer al turismo residencial, que contrarresta al turismo estacional, en estos momentos casi inexistente.