El Ayuntamiento de Málaga ha entregado hoy las alegaciones formuladas por la empresa Aertec, especialista en su área, contra las nuevas servidumbres aeronáuticas del Aeropuerto de Málaga, actualmente en trámite, y que tienen una enorme afección sobre numerosos proyectos urbanísticos, en general, y en concreto sobre su edificabilidad, es decir, la altura. Las alegaciones, por cierto, se hacen en nombre de Málaga capital, Torremolinos, Alhaurín de la Tore y Cártama, además de estar apoyadas por la Universidad de Málaga y la Diputación. La institución docente, de hecho, tiene graves problemas para construir merced a estas nuevas normas aeronáuticas en la ampliación del campus de Teatinos. Lo mismo ocurre con el PTA y su ampliación.

Así, ha indicado el edil de Ordenación del Territorio, Raúl López, esta mañana se han formulado las alegaciones ante la Dirección General de Aviación Civil "para que quede sin efecto el trámite de información pública del proyecto de real decreto por el que se modifican las servidumbres aéreas" del Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol. Entre otras cosas, se solicita que se sometan nuevamente a dicho trámite "empleando el principio de proporcionalidad y justificando la elección de las medidas propuestas, siendo menos restrictivos y que respondan al principio de interés público, manteniendo el fin que se persigue que es la seguridad aérea".

López ha explicado que Aertec no encuentra ni constata cambios sustancias en las características radioeléctricas de los equipos de comunicación del Aeropuerto, por lo que si estos no han sufrido cambios no se entiende por qué sí se modifican las servidumbres. Por otro lado, y sin entrar en explicaciones técnicas, se ha solicitado que se cambie el índice de referencia para que no afecten con tanta profundidad estas nuevas servidumbres a los parámetros de edificabilidad de sectores de desarrollo de suelo o proyectos urbanísticos. "Queremos que se busque el equilibrio entre este la seguridad aérea y la forma de medir las servidumbres, para que exista un menor impacto en la ciudad". López destaca que lo ideal es que estas nuevas servidumbres se negocien con la ciudad.

La idea del documento de alegaciones es que se trata de una solicitud para que se eliminen las nuevas servidumbres áereas planteadas por el Gobierno y, si ello no fuera aceptado por Aviación Civil, se ha incorporado por parte del equipo de gobierno una disposición transitoria en la que el Ayuntamiento garantiza que los proyectos con planeamiento aprobado se rijan por las servidumbres anteriores, es decir, las que están ahora en vigor y van a ser sustituidas por las que pretende el Ejecutivo central. En el mapa que se adjunta a esta información, las zonas azules no tienen planeamiento aprobado pero las rojas sí y son las que se van a ver más afectadas por las servidumbres en trámite.

Ya en el último pleno (en noviembre) se reclamó, con 16 votos a favor del PP, Cs y el edil no adscrito Juan Cassá y las 15 abstenciones del PSOE, Podemos e IU, a Aviación Civil que se tengan en cuenta las alegaciones. López, en esa ocasión, desveló que las nuevas servidumbres, que cambian en relación a las que regían cuando se aprobó el Plan General de Ordenación Urbana de 2011, afectarán a 15,5 millones de metros cuadrados de suelo de la ciudad y, por tanto, a la altura de los proyectos que se desarrollen en ellos.

El concejal explicó entonces que 11,5 millones de metros cuadrados ya estaban afectados con las servidumbres de 2009 y ahora siguen afectados, en mayor o menor medida, por las servidumbres que están en trámite de alegación; 4,5 millones de metros cuadrados de suelo de la capital, por cierto, se verán afectados por primera vez por estas nuevas servidumbres. En total, son 130 sectores de suelo los que se hayan concernidos por estas normas que limitan la edificabilidad según al cercanía o lejanía al aeródromo malagueño.

En el fondo del debate está la llegada del urbanismo vertical a la capital, con la proliferación de rascacielos y torres en distintos puntos de la ciudad. Otro de los proyectos afectados, por ejemplo, sería el de Repsol, según López.