Los propietarios de un taller mecánico de la calle Villafuerte han denunciado que su local, apuntalado por Urbanismo en dos áreas este verano, a causa de la caída de escombros, se ha quedado fuera de las obras municipales de rehabilitación de la calle Campo de Montiel, que se encuentra sobre el taller, después de haber pagado la parte proporcional de la rehabilitación.

Como adelantó La Opinión, las obras de esta calle Campo de Montiel, en la práctica una plaza privada de uso público, las acomete el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) que corre con el 95 por ciento de los gastos (200.000 euros), mientras que el resto lo aportan los vecinos de tres bloques de VPO.

Como ayer recordó Francisco Medina, uno de los dueños del taller, en todo momento han seguido el desarrollo de las obras, hasta el punto de que un responsable del IMV le aseguró en febrero en una reunión «que, con el dinero que había, abarcaba también mi zona, que no me preocupara». Sin embargo, señaló, en octubre este mismo responsable se desdijo y le explicó que todo se había debido «a un malentendido».

Ayer, informó Francisco Medina, un técnico de Urbanismo examinó los desperfectos con el fin de dar parte al IMV. Los dueños del local reclaman al Ayuntamiento que les incluya en las obras, por las que ya han pagado su parte.

Fuentes municipales explicaron ayer que las obras del IMV se ciñen a un proyecto de Urbanismo de 2010, «donde se establecía por parte del Servicio de Patrimonio la parte de uso público de la calle donde sí tenía cabida la actuación municipal». La parte de la calle que corresponde al taller, exceptuando una zona común que es por la que han abonado una cantidad, es privada y no se actuará en ella, informaron estas fuentes.