La Torre del Puerto, el hotel de lujo de capital catarí que se levantará en el dique de Levante del Puerto de Málaga, ha sido presentada hoy oficialmente en sociedad tras los cambios efectuados por su arquitecto, José Seguí, tras los requerimientos efectuados por Urbanismo que reducen su altura en 20 metros. Estos cambios vienen obligados por la aprobación provisional de la modificación del plan especial del Puerto. Cabe recordar que los principales cambios son una reducción de la altura, de los 135 metros a poco más de 116 (de 35 a 27 plantas) tras el retranqueo de 45 metros del edificio al ubicarse en esa zona una estación de autobuses, un aumento de las zonas verdes, la cúspide incorpora un mirador público, crecen las habitaciones hasta las 378 (desde las 350 iniciales) y todas ellas suman terrazas accesibles desde todas las dependencias. Así, Ramón Calderón, abogado, expresidente del Real Madrid y representante en España de los intereses del promotor, Andalusian Hospitality II, del grupo Al Alfia, ha previsto que las obras comiencen a finales de 2021 o principios de 2022. "Sería lo deseable", ha indicado.

El acto ha tenido lugar en el Gran Hotel Miramar y ha congregado la presencia de personalidades políticas y empresariales de la ciudad: han estado presentes el alcalde Francisco de la Torre; el edil de Urbanismo, Raúl López; el presidente de los empresarios andaluces, Javier González de Lara; el representante de los hoteleros malagueños, Luis Callejón; el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio; y su antecesor en el cargo, Paulino Plata, entre otros.

Calderón, por cierto, ha asegurado que de los 120 millones de inversión inicialmente previstos se pasará, casi con seguridad, a los 200 millones, ha indicado que ello se debe a nuevos equipamientos y el incremento de aforo en el centro de convenciones, que pasa de 600 a 1.100 plazas. En su intervención ha destacado que los inversores eligieron Málaga por su apuesta por la cultura y la innovación, además de por el clima, ha indicado que tienen en cartera otros proyectos para la ciudad (han presentado una oferta para explotar y construir la marina de San Andrés, por lo que esas iniciativas se sumarían al hotel y a esta inversión en el puerto deportivo) y ha insistido en que los cinco años de trámites han supuesto un procedimiento "largo, prolijo, proceloso" que, indica, "se ha llevado a cabo de manera escrupulosa" y afirma que el proyecto, por tanto, ha salido "reforzado". "El proyecto sale legitimado con este proceso", ha declarado y, en relación a la fuerte contestación ciudadana que ha recibido la iniciativa por el impacto visual de Málaga, ha añadido que "el consenso es imposible, no sólo en este proyecto, sino en cualquier otro". Eso, ha precisado, ha ocurrido en todas las localidades en los que se ha intentado impulsar proyectos similares, como la futura Torre de Moscú de más de 400 metros, la torre Eiffel (ha comparado), las torres Kio en Madrid y otras.

El abogado ha indicado que el patrimonio inmobiliario del grupo Al Alfia es superior a los 4.000 millones de euros en todo el mundo, por lo que "la solvencia está más que asegurada para tranquilidad de todo el mundo", ha dicho que en dos meses esperan tener la aprobación definitiva del Pleno para ir después al Consejo de Ministros y ha indicado que el inmueble será siempre "única y exclusivamente un hotel, de cinco estrellas, de gran lujo, no habrá viviendas, ni oficinas, no se trasmitirán los derechos de concesión". Ha agradecido, además, al arquitecto, su implicación en esta iniciativa y ha precisado que la ciudad, un día, también se lo agradecerá.

El arquitecto, José Seguí, ha dicho que el hotel ha requerido de un "fuerte debate colectivo" y que cinco años de trámites han contribuido a ello. "No recuerdo ningún proyecto arquitectónico que haya tenido ese control administrativo" que ha servido para mejorar el rascacielos, ha recalcado, y de ahí surge la nueva propuesta, "una solución que pretende conseguir el más amplio consenso", un plan que ha situado en el contexto de la transformación urbana sufrida por Málaga a partir del PGOU de 1983, impulsado, entre otros, por él. "Confío en el progreso de la ciudad", ha reseñado, teniendo palabras también para los detractores, "de los que deseamos coger sugerencias para llegar al máximo consenso", pero ha concluido: "El hotel del Puerto se convertirá en un referente de la contemporaneidad de la ciudad".

El regidor ha explicado, en una breve intervención, que "va a ser un gran hotel", que además contribuirá al turismo de congresos y convenciones, y "enriquece y fortalece la imagen de la ciudad", además de aplaudir la decisión de los inversores cataríes de elegir la capital de la Costa del Sol para hacer una inversión así, "un grupo serio de inversión que apostó hace años por Málaga".