El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, a petición de la junta de gobierno local, ha regularizado este martes dos concesiones otorgadas en 2017 y 2010 a la Gerencia de Urbanismo y que están directamente relacionadas con las canalizaciones de agua de la ciudad.

La primera, de 2017, es una concesión administrativa por el conjunto de colectores que históricamente han dado salida al agua de la ciudad hacia el mar, en su fachada colindante al puerto. En la actualidad han sido transformados en rebosaderos del sistema de impulsión de aguas residuales de las depuradoras de la capital.

La otra concesión, de 2010, está destinada a la construcción y explotación de la estación de bombeo de aguas residuales (EBAR-2), facilitando el saneamiento de Málaga. La concesión también hace referencia a la adecuación de las redes necesarias de la zona de San Andrés y del Paseo Marítimo Antonio Machado y a la reorganización de las redes existentes.

Tras recibir el acuerdo de la junta de gobierno local y los informes de la Sección de Valoraciones en los que se realiza una estimación de las tasas derivadas de ambas concesiones administrativas, que se devengarían a favor de la Autoridad Portuaria, así como el informe de EMASA de enero de 2020, el Consejo de Administración portuario ha acordado la regularización de las superficies de ambas concesiones, para ajustarlas a la ocupación real de las mismas, y ha aprobado las condiciones económicas de ambos títulos.

Esto, según ha informado la Autoridad Portuaria en un comunicado, facilitará la activación de un mecanismo de compensación de deudas que permitirá reducir la deuda que el Puerto de Málaga mantiene con el Ayuntamiento de la capital en concepto de Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).