El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga, Daniel Pérez, ha exigido al equipo de gobierno "que paralice la implantación del carril bici en la calzada que hace peligrar la vida de los ciclistas al obligar a convivir a usuarios de bicicletas y de patinetes con los coches".

Al respecto, advierte de que la nueva ordenanza "no garantiza la seguridad vial" y apunta a que "no creo que haga falta llegar a lamentar accidentes o fallecimientos para comprobarlo". Por ello, considera necesaria un cambio en materia de tráfico de la ciudad, como señala que reclaman los usuarios y colectivos.

Pérez habla de una situación "tremendamente perniciosa" y que puede acarrear una "bajada en la movilidad sostenible debido a que el uso de estos vehículos se ha convertido en un deporte de riesgo en la ciudad", apostando por nuevos carriles 30 en vías segregadas "en lugar de como ahora, que quieren hacer convivir a estos vehículos de movilidad personal con vehículos de gran tonelaje".

"La situación es tremendamente perniciosa y puede acarrear una bajada en la movilidad sostenible debido a que el uso de estos vehículos se ha convertido en un deporte de riesgo en la ciudad"

Daniel Pérez - Portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga

El edil socialista afea al equipo de gobierno que esta decisión "se ha impuesto sin ningún tipo de consenso, ni atendiendo a las enmiendas y propuestas que hicimos desde los grupos políticos ni también escuchando los consejos y experiencias de los principales colectivos, como es el caso de Ruedas Redondas".

Por su parte, el concejal socialista Jorge Quero ha lamentado "que el equipo de gobierno no haya dado una moratoria a la aplicación de la ordenanza de Movilidad para adaptar las vías de nuestra ciudad a los usuarios de aquellos vehículos que han salido más a la calle durante la pandemia, como los patinetes y las bicicletas".

El carril 30, "es un peligro para ciclistas y personas que van en patinete y en bicicleta, porque muchas personas no están acostumbradas a circular junto al tráfico a motor y evidentemente los padres de familia no pondrán a sus niños en peligro si van en bici, obligándoles a salir de la acera. Creemos que el equipo de gobierno no ha pensado en los menores", lamenta Quero.

Además, señala "muchos elementos de mejora" para esta ordenanza, como la inicial intención de fijar la separación mínima entre coches y bicicletas a un metro, idea en la que el equipo de gobierno "ha tenido que dar marcha atrás. Ahora, como pedimos los socialistas en consenso con colectivos de movilidad sostenible, la distancia mínima será de un metro y medio", ha zanjado el edil socialista.