Educación

Cambio de roles por la igualdad

Diez chicos y chicas de la Escuela de Segunda Oportunidad de la Asociación Arrabal-AID intercambian papeles por un día a través de una actividad teatral para vivir situaciones cotidianas de desigualdad y avanzar en su eliminación

Una de las escenas interpretadas por los jóvenes intercambiando los roles. | L.O.

Una de las escenas interpretadas por los jóvenes intercambiando los roles. | L.O. / susana fernández. málaga

«No me gusta que quedes con tus amigas», «¿dónde vas así vestida?», «el niño es tuyo»... Varias parejas de chicos y chicas están hablando y estas frases, pronunciadas en pleno siglo XXI, destacan en su diálogo pero hay algo que llama mucho más la atención: quienes hablan así son ellas y no ellos. No es el mundo al revés, sino un taller de igualdad con cambio de roles realizado por la asociación Arrabal-AID a partir de un proyecto de sensibilización de la asociación Kartio. El objetivo no es otro que luchar contra los micromachismos, empoderar a las jóvenes y trabajar con los chicos los nuevos modelos de masculinidad.

Para ello, Arrabal ha optado por una herramienta más lúdica que las tradicionales: el teatro. Diez jóvenes veinteañeros de la Escuela de Segunda Oportunidad han sido los protagonistas de esta actividad vinculada tanto al Día de la Eliminación de la la Violencia contra las Mujeres como al Día Internacional de la Mujer que se celebra hoy.

«Las mujeres no tienen por qué estar invisibilizadas, tienen que ser dueñas de su propio proceso de empoderamiento. Están pasando cosas muy fuertes como los asesinatos, la brecha salarial, los techos de cristal... y no queremos que estos temas les pasen desapercibidos a los adolescentes que estamos formando», explica Vanessa Gómez Martínez, técnica de Arrabal-AID que llevó a cabo este taller junto a Mari Francis Peñarroya Sánchez, de Kartio.

Partiendo de esta idea, los alumnos de la Escuela de Segunda Oportunidad, que reciben clases para obtener el título de ESO tras no haberlo podido hacer en su momento, se forman también en igualdad con una metodología basada en imágenes, vídeos y preguntas.

Tras un año y medio participando en un taller teórico de igualdad con perspectiva hacia el empleo impartido por Arrabal-AID, la Asociación Kartio les brindó la oportunidad de pasar a la práctica con una actividad teatral con cambio de roles para acercar a los jóvenes a la experiencia de la desigualdad.

El primer paso fue una lluvia de ideas sobre situaciones cotidianas de desigualdad para poder identificar distintos roles como una pareja que discute sobre los cuidados de su hijo, una chica a la que su padre cuestiona por querer jugar al fútbol o una situación en la que el chico controla el móvil de su pareja y le pone trabas para salir con sus amigas. Situaciones en las que los participantes podían verse reflejados fácilmente.

«Hoy en día es todo más sutil. Se hace muy importante hablar de los micromachismos. De las pequeñas cosas que pasan desapercibidas y de las que a lo mejor los jóvenes no se dan cuenta», apunta Vanessa Gómez. Esta técnica de Arrabal, junto a Mari Francis Peñarroya, apoyaron a continuación a los diez jóvenes participantes para que escenificaran esas situaciones de desigualdad, pero cambiando los roles. Los chicos haciendo de chicas y al revés. Un ejercicio de ponerse en los zapatos del otro y experimentar esa desigualdad para interiorizar la necesidad de eliminarla.

«Jamás había hecho una actividad así. Hay muchas situaciones así todavía por desgracia en el siglo en el que estamos. He aprendido a valorarme más que nunca, y que jamás debemos de rendirnos por nada ni nadie», afirma Océane Stolarczyk Merchan, una de las chicas que participaron en el taller.

Océane anima a las mujeres a luchar juntas por la igualdad y defiende que «este tipo de actividad es importante para que las chicas que están atrapadas ahí abran los ojos más que nunca y digan hasta aquí».

Un comentario que va en la línea del objetivo que persigue la asociación Kartio. «La idea es que se visibilice la desigualdad porque sigue habiéndola», apunta Mari Francis Peñarroya, que aprovecha para subrayar que en estos talleres mujeres como ella aprenden más de los jóvenes que lo que pueden enseñarles.

«Todavía queda mucho por conseguir la igualdad y talleres así ayudan a concienciar a las personas de ello», manifiesta por su parte Alejandro Martín, otro de los jóvenes implicados en la actividad.

Cinco vídeos de la experiencia

Aunque los participantes en esta experiencia de Arrabal-AID han sido diez, serán muchos los que puedan ‘despertar’ a través de los vídeos que han grabado con cada una de las escenas interpretadas. «La idea era poner el discurso de la igualdad en boca de chicos y chicas, de modo que el efecto por redes fuera que otros jóvenes pudieran sentirse identificados con este trabajo. Cuando te lo cuenta un igual, el mensaje te llega más», apunta Vanessa Gómez.

Los cinco vídeos resultantes de este taller de sensibilización, que ha contado con el apoyo del área de Igualdad de Oportunidades del Ayuntamiento de Málaga, pueden verse ya en Youtube.